miércoles, 26 de septiembre de 2018

LAS APARICIONES DE SAN MIGUEL ARCÁNGEL EN EL MONT SAN MICHEL


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San Miguel Arcángel se ha aparecido muchas veces en la tierra. Una de las apariciones más documentadas es la que se registró en el Mont San Michel en Normandía. Donde hoy hay una impresionante iglesia y monasterio, en un lugar de una belleza natural impresionante.
Este es uno de los siete monasterios que forman la Espada de San Miguel, en línea recta desde Irlanda a Israel.
En este artículo relataremos las apariciones e intervenciones de San Miguel en ese monte. Y hablaremos de lo que sucede allí en este momento,

EL MONT SAINT MICHEL, UNO DE LOS 7 MONASTERIOS DE LA ESPADA DE SAN MIGUEL
En Europa se puede distinguir una línea recta entre 7 monasterios, que van desde Irlanda a Israel, y que todos están dedicados a San Miguel Arcángel.
Esta línea o espada de San Miguel, como se le llama, está destinada a mostrar el señorío de San Miguel sobre el demonio.
La línea comienza en Irlanda, en Skellig Michael, donde se dice que San Miguel apareció a San Patricio para liberar al país de las influencias diabólicas. El segundo monasterio de la línea está en Cornualles Inglaterra, donde se dice que San Miguel apareció a pescadores. El tercer monasterio es el Mont San Michel en Normandía, Francia, del que hablaremos en este artículo, y donde se apareció a San Auberto. El siguiente monasterio está en los Alpes italianos y es la Sacra di San Miguel, una abadía que se construyó en el año 1000. El quinto monasterio es en el Monte Gargano, conocido también como Monte Sant Ángelo, en el sur de Italia. Donde la historia registra que San Miguel apareció 4 veces a través de los años, y es el más famoso de los puntos de la espada de San Miguel. El punto siguiente es el Monasterio Ortodoxo de Symi, en Grecia. Y finalmente el último punto es el monasterio del Monte Carmelo, en Haifa. Se ha descubierto que esta línea está alineada con la puesta del sol el día del solsticio de verano en el hemisferio norte. Adicionalmente hay otra línea de monasterios dedicados a San Miguel pero dentro de las Islas Británicas. Ahora pongamos foco en los sucesos que produjeron la construcción del santuario dedicado a San Miguel en el Mont San Michel en Normandía de Francia.

EL LUGAR
El Mont San Michel se encuentra en una bahía inmensa en las costas de Normandía, Francia.
Se trata de un islote rocoso de 4 km2, con un edificio cuyo campanario apunta al cielo y que resalta en el impresionante entorno natural. Se registran allí fuertes mareas, se dice que las más importantes de Europa, y que durante la marea alta dejan al islote completamente rodeado por el agua. La marea crece con muchísima rapidez y el agua se eleva 14 metros durante la marea alta. En tiempos prehistóricos la bahía era parte de la costa rocosa del continente, pero durante millones de años la erosión fue separando al islote. Hoy el monte San Michel es considerado por la UNESCO parte del Patrimonio de la Humanidad y recibe tres millones de turistas al año.
Hasta el siglo octavo el islote se llamaba Mont Tombe, pero con la aparición de San Miguel el año 708, se empezó a llamar con el nombre actual, en conmemoración a San Miguel Arcángel, el santo patrono de Normandía.
Las primeras poblaciones se registran a mediados del siglo V, cuando muchos británicos cruzaron el canal abandonando Bretaña – actual Reino Unido – por el crecimiento de la influencia anglosajona, y es por eso que esa región francesa se llama Bretaña. El islote sirvió como una fortaleza y terminó siendo saqueada por los francos. ¿Y Qué se sabe de la iglesia del Mont San Michel?

LA IGLESIA
Según “Revelatio ecclesiae Sancti Michaelis”, su origen es una abadía iniciada a consecuencias de una aparición de San Miguel Arcángel en el año 708, al obispo de Avranches, San Auberto.
Y en la aparición que relatamos después, San Miguel le ordenó construir una iglesia en la parte más alta de La Isla. Desde el año 709 se conoce la primera iglesia y la abadía tardó como 500 años para ser completada. Y luego aún se agregaron otros edificios en el siglo XIII, con el objetivo de dar alojamiento a monjes y peregrinos. La primera iglesia fue típicamente románica, pero luego evolucionó hacia una arquitectura gótica. En el lado este del islote se desarrolló un pueblo que hoy día tiene unos 50 residentes, y está allí desde la Edad Media proporcionando suvenires y alojamiento. Una comunidad de monjes benedictinos se instaló en el año 966. Pero la isla pasó zozobras en el siglo XIV durante la Guerra de los 100 años entre Francia e Inglaterra, cuando fue atacada permanentemente por los ingleses que nunca pudieron tomarla, y de este modo el Mont San Michel se convirtió en un símbolo nacional francés. Su decadencia como monasterio comenzó con la Reforma y cuando llegamos a la Revolución Francesa casi no había monje en la zona; los pocos que había fueron desalojados y el recinto se convirtió en prisión. Luego a principios del siglo XIX se comenzó su restauración histórica y desde la segunda mitad del siglo está abierta al público. A mediados del siglo XIX está abierta al público durante todo el año y en 1960 se instaló una comunidad religiosa Fraternités Monastiques de Jerusalem“. Ellos siguen la tradición monástica en la isla, que se puede rastrear al siglo sexto con la llegada de monjes irlandeses, que establecieron una pequeña ermita en el islote.

LEYENDAS ANTES DE LA APARICIÓN DE SAN MIGUEL EN EL AÑO 708
Había leyendas que en la isla había un pasaje de este mundo hacia el otro, y que los muertos de la región eran llevados al monte y allí hacían el pasaje.
Ya desde ese momento estaba asociado a San Miguel porque se creía que él cumplía la función de llevar a las almas al juicio de Dios. Por lo que el cambió de nombre a Mont San Michel solamente fue reconocimiento de esa vieja leyenda. También se habla de historias de sirenas atrayendo pecadores a las rocas y que San Miguel aparecía para guiarlos hacia la seguridad. Por eso los pescadores consideraban a San Miguel como su patrón. Y estas leyendas fueron las que llevaron a monjes peregrinos a la isla para orar. Otra leyenda refiere a un monje que buscaba aguadulce en el islote y no la encontraba, y se le apareció San Miguel. El Arcángel le dijo que golpeara una roca, y a partir de ahí fluyó el agua dulce. Pero la aparición del año 708 a San Auberto es la historia más conocida y más relacionada con el desarrollo futuro del islote.

APARICIÓN A SAN AUBERTO
Esta aparición está contada en el manuscrito del siglo X “Revelatio ecclesiae sancti Michaelis”.
San Miguel se le apareció en octubre del año 708 a San Auberto ordenandole construir un santuario a su nombre en la parte más alta de la Isla.
San Auberto consideró que era un sueño y no le prestó atención. La noche siguiente San Miguel se le apareció de nuevo repitiendo la orden de construcción del Santuario. Y también San Auberto desechó la idea, porque además implicaba una tarea titánica la construcción de una iglesia en una isla rocosa rodeada por el mar. Sin embargo San Miguel estaba decidido a que se construyera su Santuario.
Y a la noche siguiente presionó con su dedo en la frente de San Auberto mientras dormía, produciéndole un agujero.
Esto le convenció de que no se trataba solamente de un sueño y de que San Miguel estaba realmente interesado en ese Santuario. San Auberto hizo construir rápidamente el santuario y consiguió dos reliquias el monte Gargano donde se había aparecido San Miguel en el año 490; un mantel rojo y un pedazo de roca que tenían las huellas de San Miguel. El best-seller medieval la Leyenda Dorada, escrita por Jacobo de la Vorágine, agrega que San Auberto dudaba de lugar donde debía estar la iglesia.
Y se le apareció San Miguel que le dijo que debía construirse en un lugar en que un toro estaba escondido de los ladrones.
San Auberto también dudó de cómo encontrar a ese toro y se le apareció nuevamente San Miguel y le dijo que debía buscar las huellas donde había pisado el toro con sus patas. Entonces identificó el lugar pero había que quitar dos rocas, pero eran imposibles de mover por su tamaño. Y San Miguel se le apareció un hombre que le ordenó levantar a las rocas, lo que él hizo con la menor dificultad, como si no pesaran nada. Allí se edificó la iglesia y la Leyenda Dorada cuenta que San Miguel colocó su pie sobre una piedra de mármol en el altar. Y que también hizo surgir a agua en una fuente que sustenta al santuario hasta nuestros días. También relata como San Miguel salvó a una mujer con su hijo bebé cuando quedó atrapada por el rápido crecimiento de la marea alrededor del Mont San Michel. ¿Y porque San Miguel eligió ese lugar para hacer una iglesia a su nombre? Como ya dijimos este santuario es parte de la línea o espada de San Miguel, que atraviesa Europa desde las Islas británicas a Israel en línea recta.
Pero se dice que en este caso, el Mont San Michel fue donde San Miguel obtuvo su victoria sobre el dragón y expulsó a los demonios, cómo está en la Biblia.
“Entonces se entabló una batalla en el cielo: Miguel y sus Ángeles combatieron con el Dragón. También el Dragón y sus Ángeles combatieron, pero no prevalecieron y no hubo ya en el cielo lugar para ellos. Y fue arrojado el gran Dragón, la Serpiente antigua, el llamado Diablo y Satanás, el seductor del mundo entero; fue arrojado a la tierra y sus Ángeles fueron arrojados con él.” (Apocalipsis 12: 7-9).

LA LEYENDA DE GUY DE MAUPASSANT
En 1882 el famoso escritor francés Guy de Maupassant (1850-1893), escribió una historia sobre el Mont San Michel, San Miguel Arcángel y el demonio, que es uno de los puntos altos de la literatura francesa. Se trata de un campesino que le cuenta a un viajero la historia que hay detrás el esplendor de la isla. En la isla vivía San Miguel Arcángel rodeado de agua y arena para protegerse del diablo que vivía en las costas de Normandía.
El diablo vivía sobre una zona fértil pero era muy perezoso para cultivarla. Mientras San Miguel vivía una zona infértil.
Cansado de la pobreza entonces San Miguel le ofrece un acuerdo al demonio, le trabajará la tierra a cambio de la mitad de la cosecha. El diablo acepta y San Miguel le pregunta si quiere que su mitad sea la que crece debajo de la tierra o la de sobre la tierra. Entonces el demonio le responde que quiere la cosecha que crece sobre la tierra. Seis meses después la tierra ha dado una impresionante cosecha de zanahorias, nabos, cebollas, papas, etc, todos productos que crecen debajo de la tierra. El diablo se pone furioso y decir romper el acuerdo con San Miguel. Mientras que San Miguel le pide disculpas, le dice que él no tuvo la culpa que creciera solamente la cosecha de debajo de la tierra. Y le propone que en la próxima cosecha le entregará todos los productos que nacen bajo la tierra, mientras que él se quedará con los que nacen sobre la Tierra. Seis meses después se recoge una exuberante cosecha de cereales, que crecen sobre el suelo, mientras que no ha habido cosecha de productos de abajo de la tierra. El diablo se pone furioso y le exige a San Miguel que le devuelva todas las tierras. San Miguel le dice que lo va a hacer y para hacer las paces lo invita a almorzar en la cima de su isla. El demonio, muy apegado a los bienes terrenales, acepta con gusto y allí come todo tipo de manjares y bebe sidra y vino hasta hartarse.
Entonces San Miguel lleva al diablo emborrachado hasta el lugar más alto de la Isla y le da una gran patada enviándolo a Mortain, lejos de la isla, donde dice que hoy se puede ver la evidencia del impacto de la caída del diablo.
Como consecuencia, el diablo no regresó jamás a las costas de Normandía.

Fuentes:

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