Señor Jesús, venimos con mucha fe a entregarte nuestra patria para que le des paz y esperanza en este tiempo de crisis.
Perú es
un país ensantado y queremos entregarte nuestras penas y alegrías.
Líbranos
de todo mal, de toda corrupción. Y que los peruanos sepamos perdonarnos y
reconciliarnos por el bien de nuestras generaciones.
Por
nuestros gobernantes para que nos guíen con inteligencia, responsabilidad y no
caigan en la corrupción en lo material y espiritual. Dales Señor el don de la
sabiduría para que tomen las decisiones correctas en todo tiempo y lugar.
Mira a
tus hijos peruanos, Señor, con misericordia, cúbrelos con tu preciosísima
sangre.
Santa
Rosa de Lima y San Martín de Porres les pedimos por nuestra patria querida, intercedan
por el bien del Perú. San Martín de Porres, barre la miseria y pobreza humana,
y aleja la corrupción de nuestros gobernantes; Santa Rosa de Lima, embellece
con tus rosas la vida y caminos de millones de peruanos que se encomiendan a
Dios cada amanecer, que brille la luz de la fe y esperanza.
Santa
María, Madre de Dios y Madre de todos los peruanos, pisa la serpiente del
demonio que quiere destruir nuestra patria, ayúdanos a ser mejores ciudadanos.
Dios
bendiga al Perú, ahora y siempre. Amén.
¡Viva
Jesucristo, viva el Perú!
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