No solo es mi mamá, además es mi amiga, mi cómplice, mi mayor crítica, mi consejera, mi compañera de todos los días, con quien me río y me peleo, con quien veo películas, la persona que me enseña a cocinar y que lee mis relatos con más amor que ninguna otra persona y que me dice con claridad lo que le gusta y lo que no.
Es quien
me hace rezar el rosario y me enseña los Salmos. Es la persona que me soporta
en mis crisis y que siempre me perdona y a quien siempre perdono también.
Como le
dije de niño "somos un equipo" y así
ha sido y así será mientras sigamos con vida. Ella es mi destino y estoy
agradecido con Dios por eso.
Ésta es su semana y el domingo es
su día central. Intentaré darle la alegría que se merece. Soy un hijito de mamá
a mucha honra y la amo con todo mi corazón Lo haré siempre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario