domingo, 23 de enero de 2022

SANTOS QUE HAN SIDO MODELO DE VIRTUD

 CONOCE A SANTA INÉS: LA NIÑA MARAVILLOSA QUE ENFRENTÓ AL GOBERNADOR ROMANO PARA GUARDAR SU VIRGINIDAD

Desde joven decidió que consagraría su virginidad a Cristo y aunque en esa época era costumbre que las jóvenes aceptarán pretendientes desde muy niñas, ella los rechazaba. Por ello fue asediada constantemente incluso por el juez quien la amenazaba de muerte, ella nunca cedió y estaba dispuesta a morir por amor a su Divino Esposo.

(GaudiumPress/InfoCatólica) Todos los 21 de enero la Iglesia celebra el día de Santa Inés. Una santa muy joven que ofreció su vida a Cristo.

Fue conocida por San Ambrosio y San Agustín, quienes afirman que cuando fue martirizada era una niña de 13 años, para ese tiempo era emperador de Roma Diocleciano, quien publicó sus edictos persecutorios en el año 303.

Desde joven decidió que consagraría su virginidad a Cristo y aunque en esa época era costumbre que las jóvenes aceptarán pretendientes desde muy niñas, ella los rechazaba. Por ello fue asediada constantemente incluso por el juez quien la amenazaba de muerte, ella nunca cedió y estaba dispuesta a morir por amor a su Divino Esposo.

El juez ordenó que fuera llevada a un lugar de tortura que se adoraran dioses frente a ella. Cuenta la historia que los verdugos querían obligarla a quemar incienso a los ídolos, pero no lograban mover sus manos, sus manos solo hacían la señal de la cruz sobre la niña.

En vista de esta situación, el juez ordenó que fuera entregada a una casa de prostitución, ella solo confió en que Dios la cuidaría y dijo: «Puedes manchar tu espada con mi sangre, pero jamás podrás profanar mi cuerpo consagrado a Cristo».

Ya en el lugar, ella resplandecía con su pureza y nadie se atrevía a acercársele, solo un hombre lo intentó y cayó al suelo cegado por una luz celeste que no le permitió hacer nada.

Por último, el gobernador de la ciudad ordenó su ejecución. Inés, al saber la noticia, simplemente se alegró. Ella fue sepultada en la Vía Nomentana, cerca de Roma. Años después la hija de del emperador romano Constantino, erigió una basílica menor en ese lugar.

La imagen de Santa Inés es representada con un cordero. En la fecha de su celebración, en la basílica de Santa Inés, se ofrecen dos corderos, con su lana se tejen los palios y se envían a los obispos metropolitanos de Occidente, como señal de que su jurisdicción depende de Roma.

No hay comentarios:

Publicar un comentario