sábado, 7 de agosto de 2021

OBISPOS ACLARAN QUE NO HAY NORMA EN LA IGLESIA QUE OBLIGUE A UN CATÓLICO A VACUNARSE

Los obispos de la Conferencia Católica de Colorado en Estados Unidos explicaron que no existe en la Iglesia norma alguna que obligue a los católicos a vacunarse, tampoco a recibir la vacuna contra el COVID-19, pero precisaron que seguirán alentando a los fieles a “mantenerse sanos y seguros” ante la pandemia.

“Un católico puede juzgar que es correcto o incorrecto recibir ciertas vacunas por una variedad de razones, y no hay ninguna ley o regla de la Iglesia que obligue a un católico a recibir una vacuna, incluyendo las vacunas contra el COVID-19”, indicaron los obispos en una carta publicada en su sitio web el 5 de agosto.

La carta firmada por los obispos de las tres diócesis del estado de Colorado (Denver, Colorado Springs y Pueblo), se publica luego que el alcalde de Denver, Michael B. Hancock, anunció el 2 de agosto que los trabajadores públicos de la ciudad y los del sector privado en establecimientos de alto riesgo como hospitales, deberán estar plenamente vacunados para el 30 de septiembre.

La decisión del alcalde se dio ante el avance de la variante Delta que, según los científicos, es más infecciosa que las anteriores.

En su carta, los obispos de Colorado resaltan que “la vacunación no es moralmente obligatoria, por lo que debe ser voluntaria”.

Recuerdan asimismo que “existe el deber moral de rechazar el uso de productos médicos, incluidas ciertas vacunas, que se crean utilizando líneas de células humanas derivadas del aborto; sin embargo, solo se puede utilizar este tipo de vacunas en condiciones específicas: si no hay otras alternativas disponibles y si se hace con la intención de preservar la vida”.

Lo dicho por los prelados está en consonancia con la nota de la Congregación para la Doctrina de la Fe del 21 de diciembre de 2020, en la que se indica que está permitido el uso de estas vacunas cuando no hay otra disponible.

En su carta, los obispos de Colorado también afirman que “la evaluación de una persona sobre si los beneficios de una intervención médica superan los efectos secundarios indeseables debe respetarse, a menos que contradiga las enseñanzas morales católicas autorizadas”.

“Una persona está moralmente obligada a obedecer a su conciencia”, agregan.

Los prelados recuerdan luego que “a lo largo de la pandemia hemos cooperado con las diversas autoridades seculares y hemos animado a los católicos a ayudarse mutuamente, y a la sociedad en general, a mantenerse sanos y seguros durante este difícil momento”.

Asimismo afirman que entienden que “algunas personas tienen convicciones fundadas que las llevan a discernir que no deben vacunarse. Nos complace ver que en el caso del más reciente mandato de vacunación de Denver hay una adaptación a las creencias religiosas sinceras”.

“Esto es apropiado en virtud de las leyes que protegen la libertad de religión. Siempre nos mantenemos alerta cuando cualquier burocracia pretende imponer requisitos uniformes y arrolladores a un grupo de personas en ámbitos de conciencia personal”, resaltan.

Los prelados de Colorado subrayan también que “en el caso de la vacuna contra el COVID-19, estamos convencidos de que el gobierno no debe imponer intervenciones médicas a un individuo o grupo de personas. Pedimos que se respeten las convicciones y las opciones personales de cada persona”.

“Si cualquier persona llega a un juicio informado de que debe recibir o no una vacuna, esa persona debe seguir su conciencia y no debe ser penalizada por hacerlo. Animamos a cualquier persona que busque una exención a que consulte a su empleador o escuela”, aseguran.

La carta de los obispos se publicó junto a un modelo de carta de exención religiosa para cualquier fiel que solicite se respete su derecho a no vacunarse.

En la carta modelo los obispos recuerdan “la cláusula de libre ejercicio de la Primera Enmienda de la Constitución de EE.UU.” que “exige que el Estado se adapte a las personas que se oponen a las vacunas por motivos religiosos”.

Los obispos recuerdan además lo que establece el numeral 1782 del Catecismo de la Iglesia Católica: “El hombre tiene el derecho de actuar en conciencia y en libertad a fin de tomar personalmente las decisiones morales. ‘No debe ser obligado a actuar contra su conciencia. Ni se le debe impedir que actúe según su conciencia, sobre todo en materia religiosa’”.

POR WALTER SÁNCHEZ SILVA | ACI Prensa

No hay comentarios:

Publicar un comentario