“¿Es justo cancelar una vida humana para resolver un problema, cualquier problema? No, no es justo. ¿Es justo recurrir a un sicario para resolver un problema? ¿Uno que mata la vida humana? Este es el problema del aborto”, dijo el Papa Francisco en una nueva entrevista concedida a Tg5, noticiero del canale 5 de Italia.
En el diálogo transmitido esta noche (hora local) con el periodista
Fabio Marchese Ragona, el Santo Padre dijo que a la persona que se cuestiona
sobre el aborto, él también le hace la siguiente pregunta: “¿Tengo el derecho de hacer esto? La respuesta
científica: la tercera semana, casi la cuarta, ya están todos los órganos del
nuevo ser humano en el vientre de la madre, es una vida humana”.
El Papa Francisco dijo además que “no
olvidemos de una brutalidad que sucede en nuestra cultura: podemos decir que
esta es la cultura del descarte. Lo que pierde utilidad se descarta”.
“Las personas que no son útiles se descartan. Se
descartan a los niños, no queriéndolos o enviándolos al remitente cuando se ve
que tienen una enfermedad o cuando simplemente no son queridos. Antes de nacer
se cancelan en la vida”.
El Papa Francisco comentó luego que si bien “el
problema de la muerte no es un problema religioso sino humano, de ética
humana”, es algo que “también un ateo debe
resolver en conciencia”.
El Pontífice también lamentó que se descarte ancianos: “los ancianos que no producen son descartados. Descartar
a los enfermos o acelerar la muerte cuando son terminales. Descartar para que
la cosa sea más cómoda para nosotros y no nos genere tantos problemas. Esta es
la cultura del descarte”.
Tras alentar a los estados a responder ante esta situación, el Santo
Padre dijo que la cultura del descarte “requiere
una cultura de la acogida: en vez de descartar, acoger”.
“No vale la cultura de la indiferencia. Este es el
camino para salvarnos, la cercanía, la hermandad, el hacer todo juntos.
Hermandad que no quiere decir hacer un club de amigos. No. Todos”.
El Santo Padre también se refirió muy brevemente a su anunciado viaje a
Medio Oriente en marzo y dijo que “ahora no sé si
el próximo viaje a Irak se hará”.
Al ser preguntado sobre un deseo para este 2021, el Santo Padre dijo que
espera que “podamos salir de la crisis mejores y
esto significa que cada uno sea valiente y piense en los otros. Espero
que no haya cultura del descarte y de la diferencia, sino la cultura de la
hermandad, de la cercanía. ¿Cómo puedo hacerme cercano a los otros para
ayudarlos? ¿Cómo puedes hacerte cercano para ayudar? Esto es lo importante”.
“Que no hayan descartes, que no hayan estas
actitudes egoístas del yo. Sobre todo en los grupos dirigentes, emprendedores,
religiosos o políticos. Nunca hacer una cuestión del yo. El yo lo haremos
después, luego. La unidad. La unidad es más grande que el conflicto. Y rezar.
Recen más. Gracias”, concluyó el Papa.
Redacción ACI Prensa
No hay comentarios:
Publicar un comentario