Los Testigos de
Jehová aseguran que Jesús resucitó sin un cuerpo físico ¿Están en lo correcto?
Por: Lira Merlo | Fuente: estaeslafe.com
Estaba en la terminal esperando el bus que me
llevaría a Estelí, al norte de mi país. En una esquina estaban unas señoras que
por su vestimenta pude identificar como Testigos de Jehová (son ideas mías o
todas visten igual, quisiera leerlo en sus comentarios) tenían un exhibidor de
revistas con la leyenda “gratis”, una
interesante estrategia de mercado que ha puesto en marcha esta organización. Me
acerqué y tomé una revista Atalaya que decía: “¿Jesús realmente
resucitó?” me
pareció interesante así que le tomé y me dispuse a leerle.
Lo que encontré en esa revista me alarmó. ¿Cuántas personas más le habrán leído y con ello engañado
sobre uno de los temas centrales de nuestra fe?
En esta ocasión responderemos las dudas que
genera la resurrección de nuestro Señor.
PRIMERO
LO PRIMERO.
La resurrección de Jesús es el centro de nuestra
predicación, nosotros creemos lo que hemos recibido (1 Corintios 15:3-8): Porque os transmití, en primer lugar, lo que a
mi vez recibí: que Cristo murió por nuestros
pecados, según las Escrituras; que fue sepultado y que resucitó al tercer día,
según las Escrituras; que se apareció a Cefas y luego a los Doce; después se
apareció a más de quinientos hermanos a la vez, de los cuales todavía la mayor
parte viven y otros murieron. Luego se apareció a Santiago; más tarde, a
todos los apóstoles. Y en último término
se me apareció también a mí, como a un abortivo.
En 1 Corintios 15:14 San Pablo dice: “Y si Cristo no resucitó, vana es entonces nuestra
predicación, vana es también nuestra fe.” Tres versículos más adelante,
en el 17, Pablo dice una vez más: “y si Cristo no
resucitó, la fe de ustedes es vana; aún están en pecado.”
En el ambiente cristiano existen muchos temas en
los que no todos estamos de acuerdo, sin embargo negar la resurrección de
Cristo es negar al cristianismo mismo, cuando una denominación o secta predica
que Cristo no ha resucitado inmediatamente se vuelve anatema, (apostata de la
fe, deja de ser considerada cristiana)
Sin
embargo, el problema que encontré en la revista de los Testigos de Jehová no es
tanto acerca de si resucitó o no, sino en la forma como resucitó.
Desafortunadamente, los falsos cultos atacan la resurrección de Cristo y la
reinterpretan en formas diferentes; como por ejemplo, negando Su resurrección
física. Debemos preguntarnos si Jesús resucitó de los muertos en el mismo
cuerpo con que murió o si resucitó en un cuerpo espiritual que no era carne y huesos.
La respuesta a esta pregunta es vital ya que la misma separa a los verdaderos
cristianos de los sistemas falsos. Por lo tanto, aquí tenemos la doctrina
correcta de la resurrección en el cristianismo, la cual, la consideramos tan
importante, que la misma debe ser establecida como una declaración verdadera.
Luego
de leer aquella Atalaya decidí investigar en su
página y encontré que en su edición de Julio 1, 1998 en la página 20 dice, “Jesucristo…murió y fue resucitado como un espíritu.” Y
en la página 14 ellos dicen, “Jesucristo no fue
levantado como humano.”
Así mismo pueden entrar a este enlace en
donde podrán confirmar cual es la creencia que ellos promueven. (Aviso, ellos
son muy sutiles para convencerte de sus ideas, no te quedes mucho tiempo en esa
página)
Hasta
los niños en la organización La Atalaya son enseñados esta doctrina. Mi libro
de Historias Bíblicas, p. 103, dice, “¿Sabes lo que
le sucedió al cuerpo de Jesús? Dios causó que se desapareciera. Dios no lo
levantó a vida en el cuerpo carnal en el cual murió. Él le dio a Jesús un nuevo
cuerpo espiritual, como tienen los ángeles en el cielo. Pero para demostrarles
a sus discípulos que él está vivo Jesús puede tomar un cuerpo que las personas
puedan ver…”
¿Esta declaración es real? ¿Un Cristiano Católico puede creer esto?
CONSIDEREMOS LO SIGUIENTE:
La
resurrección de Jesús es el hecho más importante de la historia moderna, a
causa de esta los apóstoles fueron perseguidos, martirizados y obligados a
refugiarse en las catacumbas de Roma, sin embargo su fe se mantuvo firme en el
grito “Jesucristo ha resucitado”
Ahora
nosotros en nuestros hogares recibimos propaganda que niega la resurrección
verdadera dejando a Jesús como una especie de fantasma.
1. Leer del Evangelio según San Juan
20:19-29.
Al
atardecer de aquel día, el primero de la semana, estando cerradas, por miedo a
los judíos, las puertas del lugar donde se encontraban los discípulos, se
presentó Jesús en medio de ellos y les dijo: "La
paz con vosotros". Dicho esto, les mostró las manos y el costado.
Los discípulos se alegraron de ver al Señor. Jesús les dijo otra vez: "La paz con vosotros. Como el Padre me envió,
también yo os envío". Dicho esto, sopló sobre ellos y les dijo: "Recibid el Espíritu Santo. A quienes perdonéis los
pecados, les quedan perdonados; a quienes se los retengáis, les quedan
retenidos".
Tomás,
uno de los Doce, llamado el Mellizo, no estaba con ellos cuando vino Jesús. Los
otros discípulos le decían: "Hemos visto al
Señor". Pero él les contestó: "Si
no veo en sus manos la señal de los clavos y no meto mi dedo en el agujero de
los clavos y no meto mi mano en su costado, no creeré". Ocho días
después, estaban otra vez sus discípulos dentro y Tomás con ellos. Se presentó
Jesús en medio estando las puertas cerradas, y dijo: "La
paz con vosotros" Luego dice a Tomás: "Acerca
aquí tu dedo y mira mis manos; trae tu mano y métela en mi costado, y no seas
incrédulo sino creyente" Tomás le contestó: "Señor mío y Dios mío." Dícele Jesús: "Porque me has visto has creído. Dichosos los que no
han visto y han creído".
Aquí
leemos una de las apariciones de Jesús a sus apóstoles, entre ellos encontramos
a Tomas, quien no creía que Jesús pudo haber resucitado (con su cuerpo físico)
Jesús muestra su cuerpo e incluso las heridas con las que fue martirizado. Un
espíritu no tendría grabadas las marcas de su cuerpo, es más, un espíritu no
tiene cuerpo.
2.
Leer del Evangelio según San Lucas
24:38-43
Pero él les dijo: "¿Por
qué os turbáis, y por qué se suscitan dudas en vuestro corazón? Mirad mis manos
y mis pies; soy yo mismo. Palpadme y ved que un espíritu no tiene carne y
huesos como véis que yo tengo". Y, diciendo esto, los mostró las
manos y los pies. Como ellos no acabasen de creerlo a causa de la alegría y
estuviesen asombrados, les dijo: "¿Tenéis aquí
algo de comer?". Ellos le ofrecieron parte de un pez asado. Lo tomó
y comió delante de ellos.
En
este pasaje vemos la declaración viva de Jesús quien afirma “un espíritu no tiene carne ni huesos como ven que yo
tengo” y para ir más allá Jesús pide alimento, y come delante de ellos.
Jesús mismo desmiente de tajo la doctrina enseñada por esta secta.
¿Después de leer esto estoy dispuesto a aceptar la propaganda
de esta secta que niega la resurrección de Jesús?
¿Es correcto que un niño católico lea el “Mi libro de
Historias Bíblicas”?
Jesucristo ha resucitado,
en verdad ha resucitado. No es una especie de fantasma rondando por ahí,
la resurrección de Cristo involucra la glorificación de su cuerpo, su cuerpo
glorioso como preludio al que nosotros tendremos en la resurrección
final.
Por ello hermanos no podemos permitir que estas enseñanzas erradas
entren en nuestros hogares, así les aconsejo que saquen de sus casas toda
revista o propaganda sectaria (involucrando ese libro de historias bíblicas
para niños) y crecer cada día en nuestra fe católica.
En
nuestras librerías hay muy buenos libros de formación, acerquémonos a una
cercana para conocer más nuestra fe y así vivirla con ánimo.
ULTIMAS PISTAS DE
REFLEXIÓN:
“¡Es verdad! ¡El Señor ha resucitado!” (Lc
24:34). Con esta fórmula resume Lucas la afirmación decisiva de nuestra fe. El
movimiento de Jesús hubiera concluido con el fracaso de la cruz y la dispersión
de sus seguidores si no hubiera sido por ese acontecimiento excepcional con el
cual todo comenzó de nuevo. La proclamación de la resurrección de Jesús es
absolutamente fundamental y sin ella no habría fe cristiana. Y es en la
veracidad de esta afirmación donde nuestra fe se juega su ser o no ser. Porque,
como señaló ya en los primeros tiempos el apóstol Pablo, si Jesús no hubiese
resucitado la predicación sería vana y seríamos los hombres más dignos de
compasión (1 Cor 15:14-19). Vivamos la resurrección de Cristo con amor y
entusiasmo en nuestras parroquias y hogares recordando que el sepulcro está
vacío.
Gracias por leernos. Paz y
bien.
Artículo publicado
originalmente en estaeslafe.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario