Acá
estoy
un video muestra muy bien los sueños, las alegrías, las dificultades y las
contradicciones de esta edad.
Por: Juan Andrés Zenteno | Fuente: Catholic-link.com
"Estoy": Los jóvenes estamos llenos
de vida. Vivimos
soñando, imaginando futuros, convirtiendo posibilidades en realidades
palpables. Buscamos vivir al máximo cada experiencia. Soñamos con experimentar
cada sensación que nos otorga la vida. Miramos a nuestros mayores, y a
veces les preguntamos dónde quedaron los sueños que soñaron. Les echamos en
cara su falta de alegría, su descontento. Les pedimos que no nos quiten las
esperanzas, que no nos borren nuestros anhelos, que no nos roben la ilusión de
soñar con un mundo distinto, de soñar con la felicidad.
"Acá": Los
jóvenes también nos damos cuenta de que estamos lejos de lo
que buscamos. Vemos
el presente (y también el proceso de nuestros mayores) y sabemos que falta
mucho. Somos algunas veces juzgados por los que nos preceden. Piensan que
soñamos cosas muy grandes, que son irrealizables. Nos quieren advertir de todos
los peligros, como si nosotros no nos diéramos cuenta.
Pero nosotros nos damos cuenta del mundo en qué
vivimos. Vemos que le falta alegría, que le falta entrega. Vemos que muchos
viven sin una sonrisa en la cara. Y vemos que muchos jóvenes como nosotros
también experimentan esto. El
"acá" que vivimos es difícil. A veces las dificultades vienen de los conflictos
entre nosotros: muchas veces nos hacemos daño.
"Acá estoy": El video muestra a muchos
jóvenes de diferentes lugares que viven todas estas experiencias. Nos
cuentan sus anhelos, sus contradicciones, sus sueños y sufrimientos. Los “veintipico” son
un momento muy especial en la vida. Son el momento de vivir muchas
experiencias, de empezar a realizar los sueños, pero al mismo tiempo, son el
momento de sentar cabeza, de tomar las decisiones fundamentales para la vida.
Creo que este video muestra muy bien los sueños,
las alegrías, las dificultades y las contradicciones de esta edad. Sin embargo,
se queda solo con un mensaje de que ser jóvenes es tener que vivir estas
experiencias “a fondo”, pero que no llevan a ninguna parte. No se plantea el compromiso con un proyecto de vida que valga la pena
como la respuesta a estas contradicciones.
"Acá estoy, Señor": Las respuestas de estos chicos son muy buenas para
poder cuestionar a los jóvenes de hoy.
Plantea su situación actual de una manera muy elocuente. Sin embargo, no toma
en cuenta una realidad fundamental: Dios quiere algo de nosotros
los jóvenes. Nos ha puesto estos
anhelos para que los vivamos en plenitud toda la vida. Nos invita a vivir la
vida al máximo, pero no en un mero “autenticismo”, sino
en el verdadero compromiso del amor. El Papa San Juan Pablo II nos regala unas
palabras muy ricas: Queridos jóvenes, solo Jesús conoce vuestro corazón, vuestros
deseos más profundos. Solo Él, que os ha amado hasta la muerte, es capaz de
colmar vuestras aspiraciones. Sus palabras son palabras de vida eterna,
palabras que dan sentido a la vida. Nadie fuera de Cristo podrá daros la
verdadera felicidad.
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