jueves, 8 de agosto de 2019

SAN CAYETANO


HOY LA IGLESIA CELEBRA A SAN CAYETANO, PATRONO DEL PAN Y DEL TRABAJO

“En el oratorio rendimos a Dios el homenaje de la adoración, en el hospital le encontramos personalmente", solía decir San Cayetano, patrono del pan y del trabajo, cuya fiesta se celebra cada 7 de agosto.
San Cayetano nació en Vicenza (Italia) en 1480. Estudió en la Universidad de Padua, distinguiéndose en la teología y doctorándose en derecho civil y canónico.
Su inquietud vocacional lo llevó a Roma, donde al poco tiempo fue nombrado secretario del Papa Julio II. A la muerte del Pontífice quiso prepararse para el sacerdocio y es ordenado en 1516, a los 36 años.
Fundó en Roma la “Cofradía del Amor Divino”, asociación de clérigos que promovía la gloria de Dios. Luego ingresó en el Oratorio de San Jerónimo que seguía la misma línea de la obra que había fundado, pero que incluía además a laicos pobres.
Sus amigos se molestaron por esta decisión ya que consideraban que no debía estar allí alguien de alcurnia como él, pero el Santo siguió adelante, atendiendo incluso a pacientes con enfermedades que muchos despreciaban.
Estando en Venecia implantó la bendición con el Santísimo Sacramento y animó a la comunión frecuente. Una vez escribió: "no estaré satisfecho sino hasta que vea a los cristianos acercarse al banquete celestial con sencillez de niños hambrientos y gozosos, y no llenos de miedo y falsa vergüenza".
Por aquel entonces la cristiandad pasaba por un periodo de crisis. San Cayetano, contemporáneo de Lutero, incentivaba una verdadera reforma de vida y costumbres en la Iglesia, pero sin dividirla.
En Roma, junto a algunos compañeros, funda la Orden de Clérigos Regulares Teatinos que buscaba la renovación del clero, la predicación de la doctrina, el cuidado de los enfermos y la restauración del uso frecuente de los sacramentos.
San Cayetano tuvo que sufrir incomprensiones y rechazos por la misión renovadora que había emprendido. Más adelante, con el Beato Juan Marinoni, el Santo fundó los “Montes de Piedad” para liberar de la miseria a pobres y marginados.
Al final de su vida, abrió hospicios para ancianos y hospitales. Cuando cae muy enfermo, los médicos le sugirieron que ponga un colchón sobre su cama de tablas, pero el Santo respondió: “Mi salvador murió en la cruz; dejadme pues morir también sobre un madero". Partió a la Casa del Padre en Nápoles el 7 de agosto de 1547 a los 77 años.
El Papa Francisco, incluso desde que era Cardenal, le tiene un cariño especial y en Argentina el santo es muy querido. Son numerosos los peregrinos que van a venerarlo en el templo en honor de San Cayetano del barrio porteño de Liniers (Buenos Aires).
Allí los fieles y devotos, cada año, le piden pan y trabajo y le agradecen lo que se les ha dado por su intercesión ante Dios.
Redacción ACI Prensa

CONOCE A SAN CAYETANO: PATRONO DEL PAN Y DEL TRABAJO TAN QUERIDO POR EL PAPA FRANCISCO
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La Iglesia celebra a San Cayetano de Thiene, sacerdote italiano fundador de la Orden de Clérigos Regulares Teatinos. Él es conocido como patrono del pan y del trabajo y es muy querido por el Papa Francisco y millones de argentinos.
A continuación presentamos algunos aspectos de su vida:
1.- FUNDÓ SU ORDEN INSPIRADO EN LOS APÓSTOLES
San Cayetano fundó la Orden de Clérigos Regulares o Teatinos, en 1524, junto Bonifacio de Colle, Pablo Consiglieri y Juan Pedro Carafa (que después sería el Papa Pablo IV). Se propuso renovar al clero en su vida apostólica, espiritual y en la prédica de la doctrina, tomando como modelo la vida de los Apóstoles.
2.- CELEBRÓ SU PRIMERA MISA LUEGO DE TRES MESES DE PREPARACIÓN
El amor y respeto que tenía por la Santa Misa fue tan grande que para celebrarla por primera vez, pasó tres meses preparándose lo mejor posible. Cuando el día llegó, quedó sobrecogido por el don tan maravilloso del que no se consideraba digno.
3.- PROMOVIÓ LA COMUNIÓN FRECUENTE
Su profundo amor por Cristo Eucaristía lo llevó a establecer la bendición con el Santísimo Sacramento y la promoción de la comunión frecuente. 
"No estaré satisfecho sino hasta que vea a los cristianos acercarse al Banquete Celestial con sencillez de niños hambrientos y gozosos, y no llenos de miedo y falsa vergüenza", escribió.
4.- IMPULSÓ UNA REFORMA EN LA IGLESIA 
La crisis que vivió la Iglesia en la época de Lutero, motivó a San Cayetano a impulsar una verdadera reforma de vida y costumbres dentro de la Iglesia, pero sin dividirla. 
Cuando muchos querían atacar y criticar a la Iglesia Católica, San Cayetano les decía: "Lo primero que hay que hacer para reformar a la Iglesia es reformarse uno a sí mismo".
5.- EN TIEMPOS DE HAMBRE CONFIÓ EN LA PROVIDENCIA
Los miembros de su orden repartían todos sus bienes entre los más pobres, al punto que muchas veces se quedaban sin que comer. 
Un día San Cayetano se acercó hasta el altar y dio unos pequeños golpes a la puerta del Sagrario donde estaban las Hostias consagradas y con mucha confianza le dijo al Señor: “Jesús amado, te recuerdo que no tenemos hoy nada para comer”. Luego de un momento unas mulas llegaron con alimentos, y los arrieros no quisieron decir de dónde las enviaban.
6.- ELIGIÓ MORIR SOBRE UN MADERO COMO CRISTO
Cuando San Cayetano enfermó gravemente los médicos aconsejaron que en su cama de tablas, donde dormía, se colocara un colchón de lana. Pero el santo se negó diciendo: “Mi salvador murió en la Cruz; dejadme pues morir también sobre un madero”.
De esta forma, San Cayetano falleció el 7 de agosto de 1547 y sus reliquias se encuentran en la iglesia de Santo Paolo, en Nápoles.
7.- FUE CANONIZADO CON SANTA ROSA DE LIMA, SAN LUIS BELTRÁN Y SAN FRANCISCO DE BORJA
El 12 de abril de 1671 San Cayetano fue canonizado junto a Santa Rosa de Lima, la primera santa de América; San Luis Beltrán, evangelizador en Colombia; y San Francisco de Borja. 
8.- SU FIESTA ES SIGNO DE SOLIDARIDAD
San Cayetano es muy querido en Argentina por eso desde 1970 miles de devotos acuden a su fiesta en el Santuario de Liniers, Buenos Aires. Muchos cambian las tradicionales velas y flores, por alimentos y ropa para ser distribuidos en las regiones más necesitadas del país.
El Papa Francisco, cuando era Arzobispo de Buenos Aires, presidió la Misa central de su fiesta durante varios años.
POR LILIANA MONTES | ACI Prensa

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