martes, 17 de abril de 2018

LOS SIGNOS QUE ACOMPAÑARÁN AL ANTICRISTO


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A través de los siglos, distintas personas santas han venido dando a conocer revelaciones celestiales de lo que sería el Anticristo y los tiempos por venir.

El beato Henry Newman – el más reciente referente que habló sobre el Anticristo profusamente – lo asoció con la apostasía dentro de la Iglesia.
En el primero de sus sermones (El tiempo del Anticristo), Newman decía literalmente que:
“El hombre de pecado nace de una apostasía, o por lo menos accede al poder por medio de una apostasía, o es precedido por una apostasía, o no existiría si no fuese por una apostasía”.
Antes, había citado como ejemplo de apostasía unos hechos relatados en el libro de los Macabeos: “En aquellos días surgieron en Israel hombres inicuos, que persuadieron a muchos diciendo: ‘Vamos y hagamos alianza con los paganos que nos rodean, puesto que desde que nos separamos de ellos nos han sobrevenido muchas penalidades’. Este consejo les pareció bien” (1 Mac 1, 11-13).
Siendo Israel pre figura de la Iglesia, lo que Newman estaba advirtiendo sobre la apostasía es que surgirán en la Iglesia hombres inicuos que persuadirán a muchos para hacer alianza con los paganos que nos rodean.
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Aduciendo lo penoso que resulta separarse del mundo.
Newman ya había fundamentado esta profecía apuntando el “enfriamiento de la caridad” previsto por Jesucristo (Mt 24:12) como su causa profunda. La perversión apóstata y anticrística de la caridad es precisamente tratar de “humanizarla”, rechazando, rebajando u ocultando la norma divina. En El Amo del Mundo (The Lord of the World), Robert Hugh Benson desarrolló magistralmente estas previsiones de Newman, describiendo que las dimensiones moral y religiosa del hombre se veían disociadas cuando el ascenso del Anticristo:
“En las relaciones humanas, tanto a nivel individual como social, la moral ya no era expresión de la naturaleza del hombre, y el amor (la caridad) ya no pasaba por Dios.
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Había perdido su dimensión vertical, quedaba a ras de tierra, chata, horizontal: se había convertido en altruismo, en filantropía”.

QUE SIGNOS TENDRÁ EL ANTICRISTO SEGÚN FULTON SHEEN
En un sermón de radio dado en 1947, el Arzobispo Fulton Sheen dijo que el anticristo no será llamado así, de lo contrario no tendría seguidores. No llevará medias rojas, ni vomitará azufre, ni llevará una lanza, ni agitará una cola de flecha como Mefistófeles en el Fausto. En ninguna parte de la Sagrada Escritura hallamos datos para el mito popular del diablo como un bufón que se viste como un payaso. Más bien se le describe como un ángel caído, y como “el príncipe de este mundo” cuyo objetivo es decirnos que no hay otro mundo.
Su lógica es simple: si no hay cielo no hay infierno; si no hay infierno, no hay pecado; si no hay pecado, no hay juicio, y si no hay juicio entonces el mal poder ser el bien y el bien el mal.
Pero por encima de todas estas descripciones, Nuestro Señor nos dice que va a engañar aun a los escogidos. Veamos algunos detalles de lo que expresa Fulton Sheen. -El vendrá disfrazado como el gran humanitario, que hablará de paz, prosperidad y abundancia. No como medio para llevarnos a Dios, sino como fin en sí mismo. -Él va a escribir libros sobre la nueva idea de Dios y cómo adaptarse a la forma de vivir. Él inducirá la fe en la astrología a fin de que no sea nuestra voluntad, sino las estrellas responsables de nuestros pecados.
• Explicará la culpa psicológicamente como el sexo reprimido, haciendo que los hombres se llenen de vergüenza si sus semejantes dicen que son no tolerantes y liberales.
• Identificará la tolerancia con la indiferencia de lo correcto e incorrecto.
• Va a fomentar más divorcios bajo el disfraz de que otro compañero es “vital”.
• Va a aumentar el amor por el amor y disminuir el amor por las personas.
• Invocará la religión para destruir la religión.
• Él ni siquiera hablará de Cristo y pero dirá que él fue el hombre más grande que jamás haya existido.
• Su misión, dirá, será la de liberar a los hombres de las servidumbres de la superstición y el fascismo, que nunca definirá lo que es.
• En medio de todo su amor aparente para la humanidad y su discurso simplista de la libertad y la igualdad, tendrá un gran secreto que le dirá a nadie; no va a creer en Dios.
• Y debido a que su religión será la hermandad sin la paternidad de Dios, va a engañar aun a los escogidos.
• Se va a establecer un contra-Iglesia, que será el mono de la Iglesia, porque el diablo es el mono de Dios.
Será el cuerpo místico de la anti-Cristo, que en todo lo externo se parecerá a la Iglesia como cuerpo místico de Cristo.
• Utilizando la desesperada necesidad de Dios, inducirá al hombre moderno, en su soledad y la frustración, a un hambre cada vez más de ser miembro de la comunidad que dará al hombre la ampliación de su propósito.
Sin ninguna necesidad de modificación personal y sin la admisión de culpa personal. Veamos una serie completa de santos que han hablado sobre el Anticristo para hacernos una idea de los elementos que debemos discernir para identificarlo. Por otro lado, si bien no es parte del tema de este artículo, hay que tomar en cuenta que el Anticristo será acompañado por un Falso Profeta, que señalará al Anticristo como digno de confianza. Veamos una serie completa de santos que han hablado sobre el Anticristo para hacernos una idea de los elementos que debemos discernir para identificarlo. Por otro lado, si bien no es parte del tema de este artículo, hay que tomar en cuenta que el Anticristo será acompañado por un Falso Profeta, que señalará al Anticristo como digno de confianza.

TRES EVANGELISTAS
Encabezando la lista de santos que hablaron sobre el Anticristo tenemos a tres evangelistas que escribieron la Biblia.
San Juan Evangelista
Nos dijo:
“El que niega que Jesús es el Cristo. El que niega al Padre y al Hijo, éste es el Anticristo” (1 Juan 2:22).
San Pablo
Dejó en claro en 2 Tesalonicenses 2:3-12:
“Que nadie os engañe de ninguna manera.
Primero tiene que venir la apostasía y manifestarse el Hombre impío, el Hijo de perdición, el Adversario que se eleva sobre todo lo que lleva el nombre de Dios o es objeto de culto, hasta el extremo de sentarse él mismo en el Santuario de Dios y proclamar que él mismo es Dios.
¿No os acordáis que ya os dije esto cuando estuve entre vosotros? Vosotros sabéis qué es lo que ahora le retiene, para que se manifieste en su momento oportuno. Porque el ministerio de la impiedad ya está actuando. Tan sólo con que sea quitado de en medio el que ahora le retiene, entonces se manifestará el Impío, a quien el Señor destruirá con el soplo de su boca, y aniquilará con la Manifestación de su Venida. La venida del Impío estará señalada por el influjo de satanás, con toda clase de milagros, señales, prodigios engañosos, y todo tipo de maldades que seducirán a los que se han de condenar por no haber aceptado el amor de la verdad que les hubiera salvado. Por eso Dios les envía un poder seductor que les hace creer en la mentira, para que sean condenados todos cuantos no creyeron en la verdad y prefirieron la iniquidad”.
San Mateo
Registró las palabras de Jesús sobre esto en Mateo 24:15-27.
Cuando veáis, pues, la abominación de la desolación, anunciada por el profeta Daniel, erigida en el Lugar Santo (el que lea, que entienda), entonces, los que estén en Judea, huyan a los montes; el que esté en el terrado, no baje a recoger las cosas de su casa; y el que esté en el campo, no regrese en busca de su manto. ¡Ay de las que estén encinta o criando en aquellos días! Orad para que vuestra huida no suceda en invierno ni en día de sábado. Porque habrá entonces una gran tribulación, cual no la hubo desde el principio del mundo hasta el presente ni volverá a haberla. Y si aquellos días no se abreviasen, no se salvaría nadie; pero en atención a los elegidos se abreviarán aquellos días. Entonces, si alguno os dice: Mirad, el Cristo está aquí o allí, no lo creáis.
Porque surgirán falsos cristos y falsos profetas, que harán grandes señales y prodigios, capaces de engañar, si fuera posible, a los mismos elegidos.
¡Mirad que os lo he predicho! Así que si os dicen: Está en el desierto, no salgáis; Está en los aposentos, no lo creáis. Porque como el relámpago sale por oriente y brilla hasta occidente, así será la venida del Hijo del hombre”.

EN EL CATECISMO DE LA IGLESIA CATÓLICA
Antes de mirar a otros Santos, recordemos lo que dice el Catecismo, que es una compilación reciente de la doctrina católica:

Numeral 675
Antes del advenimiento de Cristo, la Iglesia deberá pasar por una prueba final que sacudirá la fe de numerosos creyentes.
La persecución que acompaña a su peregrinación sobre la tierra desvelará el “misterio de iniquidad” bajo la forma de una impostura religiosa que proporcionará a los hombres una solución aparente a sus problemas mediante el precio de la apostasía de la verdad.
La impostura religiosa suprema es la del Anticristo, es decir, la de un seudo-mesianismo en que el hombre se glorifica a sí mismo colocándose en el lugar de Dios y de su Mesías venido en la carne”.
Numeral 677
La Iglesia sólo entrará en la gloria del Reino a través de esta última Pascua en la que seguirá a su Señor en su muerte y su Resurrección. El Reino no se realizará, por tanto, mediante un triunfo histórico de la Iglesia en forma de un proceso creciente, sino por una victoria de Dios sobre el último desencadenamiento del mal que hará descender desde el cielo a su Esposa.
El triunfo de Dios sobre la rebelión del mal tomará la forma de Juicio final después de la última sacudida cósmica de este mundo que pasa”.

DOCTORES DE LA IGLESIA
Santo Tomás de Aquino
Según el Doctor Angélico:
“Al igual que en Cristo habita la plenitud de la deidad así en el Anticristo, habita la plenitud de toda iniquidad. No es precisamente en el sentido de que su humanidad ha de ser asumida por el diablo en la unidad de la persona… sino que el demonio infunde su maldad más copiosamente en él más que en todos los demás. De esta manera, todos los malvados que han muerto antes son signos del Anticristo”.
Sus obras no han ser lo que parecen ser, explicó Aquino:
“(Sus milagros) dice que son reales al igual que los magos del faraón hicieron ranas reales, pero no van a ser verdaderos milagros porque van a ser realizados por el poder de causas naturales.
Sus milagros serán mentiras. Nadie puede realizar un verdadero milagro en contra de la fe, porque Dios no es un testigo de la falsedad.
En consecuencia, nadie predicando una doctrina falsa puede hacer milagros…”
San Agustín
Este otro importante Doctor nos dijo:
“Sobre lo que no hay duda es que lo que Él dijo es esto, que Cristo no vendrá a juzgar a vivos y muertos a menos que el Anticristo, su adversario, venga primero a seducir a los que están muertos en el alma.
(Su) presencia será de la obra de satanás, con todo el poder, señales, y milagros mentirosos, y con toda la seducción de la injusticia para los que se pierden. Para entonces satanás será desatado y por medio de ese Anticristo deberá trabajar con todo el poder en una mentira, aunque de un modo estupendo”.
San Juan Damasceno
En el siglo VIII manifestó igualmente que:
“Durante la primera parte de su reinado – de su tiranía más bien – desempeñará más la parte de la santidad; pero cuando gane el control completo, es cuando perseguirá a la Iglesia de Dios y revelará toda su maldad.
Y él podría venir entre señales y prodigios mentirosos – falsos y no reales – y podrá seducir a aquellos cuya intención se apoya en una base podrida e inestable y hacerlos abandonar al Dios vivo, en la medida en que escandalizará (si es posible) aun a los escogidos…”
Santa Hildegarda de Bingen
Tenía mucho que revelar acerca del Anticristo. Estos son sólo algunos detalles:
“Luego del nacimiento del Anticristo los herejes predicarán sus falsas doctrinas de modo imperturbable, con el resultado de que los cristianos tengan dudas acerca de su santa fe católica. Después de su nacimiento, falsos maestros y doctrinas aparecerán, seguidos por guerras, hambre y peste. Su madre rara vez dejará que alguien lo vea, y sin embargo, por arte de magia, se las arreglará para ganar el amor de la gente para él.Cuando haya llegado a la madurez completa, él anunciará públicamente una doctrina hostil a la religión.
Él tentará y atraerá a la gente a sí mismo mediante la concesión de una exención total de la observancia de todos los mandamientos divinos y eclesiásticos, perdonándoles sus pecados y exigiéndoles sólo su creencia en su divinidad.
El despreciará y rechazará el bautismo y el evangelio. El abrirá la boca para predicar la contradicción. Él dirá: Jesús de Nazaret no es el hijo de Dios, sólo un impostor que se dijo a sí mismo Dios; y la Iglesia instituida por él sólo es superstición. El verdadero Cristo ha venido en su persona. Él va a decir: Yo soy el Salvador del mundo. El concederá total libertad sobre los mandamientos de Dios y de la Iglesia, y permitirá a todos vivir como dictan sus pasiones. Al hacerlo él espera ser reconocido por el pueblo como libertador del yugo, y como la causa de la prosperidad en el mundo. Dirá que no se necesita el ayuno ni amargarse la vida por la renuncia… Será suficiente con amar a Dios… Él predicará el amor libre y despedazará los lazos familiares. Él va a desdeñar todo lo santo, y él ridiculizará todas las gracias de la Iglesia con burla diabólica. Se condenará la humildad y fomentará orgullosos y horripilantes dogmas. Él derribará lo que Dios ha enseñado en el Antiguo y el Nuevo Testamento y sostendrá que el pecado y el vicio no son tales… Se aliará con los reyes, los príncipes y los poderosos de la tierra; condenará la humildad y ensalzará todas las doctrinas de orgullo. Su arte y magia aparentarán los prodigios más asombrosos…”

PADRES DE LA IGLESIA
Los primeros Padres de la Iglesia ofrecieron grandes revelaciones también.

San Hipólito
Lo describió cómo
“El engañador busca compararse a sí mismo en todas las cosas al Hijo de Dios.
Cristo es un león, así el Anticristo es también un león; Cristo es un rey, así el Anticristo es también un rey. El Salvador se ha manifestado como un cordero (Juan 1:29); por lo que también, de igual manera, aparecerá como un cordero, aunque dentro de él es un lobo. El Salvador vino al mundo con la circuncisión, y vendrá de la misma manera. El Señor envió apóstoles entre todas las naciones, y él de la misma manera enviará falsos apóstoles. El Salvador reunió las ovejas que estaban esparcidas, y de igual manera él reunirá a un pueblo que estaba disperso. El Señor le dio un sello a los que creen en él, y él le dará a cada uno de la misma manera…”
San Ireneo
Dio estos detalles
“(El), siendo un apóstata y un ladrón, está ansioso por ser adorado como Dios; y que, aunque un simple esclavo, quiere para sí mismo ser proclamado como un rey. Él (el Anticristo) al estar dotado de todo el poder del demonio, vendrá, no como un rey justo, ni como un rey legítimo, en sujeción a Dios, sino como un impío e inicuo; como apóstata, injusto y asesino; como un ladrón, concentrándose en sí mismo [toda] la apostasía satánica, y dejando de lado los ídolos para persuadir a [los hombres] que él mismo es Dios, levantándose a sí mismo como el único ídolo, que tiene en sí mismo los errores múltiples de los otros ídolos. Esto lo hace, con el fin de que los que [ahora] adoran al diablo por medio de muchas abominaciones, puedan servirle a él mismo como este único ídolo del cual el apóstol habla así en la segunda carta a los Tesalonicenses… El Señor también habló de la siguiente manera a aquellos que no creen en Él: Yo he venido en nombre de mi Padre, y no me habéis recibido: cuando otro viniere en su propio nombre, a él lo recibiréis (Juan 5: 43) llamando al Anticristo el otro, porque está alienado del Señor”.
San Ireneo señaló que el Ángel Gabriel dijo en Daniel 12:7 su tiranía tendrá una duración de tres años y seis meses.

SANTOS Y MÍSTICOS
Los primeros siglos hasta el siglo XXI tienen santos que recibieron revelaciones de parte de Dios sobre el Anticristo y el fin de los tiempos.

Santa Brígida de Suecia
En el siglo XXIV dijo:
“El tiempo del Anticristo estará cerca cuando la medida de la injusticia se desborde, cuando la maldad haya crecido hasta proporciones inmensas, cuando los cristianos amen las herejías y la injusta habilidad de pisotear a los siervos de Dios… y… colocar la espiritualidad y la justicia bajo sus pies.
Esta debe ser la señal de que el Anticristo viene sin demora”.
Beata Ana Catalina Emmerich
A principios del siglo XIX ella vio:
“Cuando el tiempo del reinado del Anticristo esté cerca, aparecerá una religión falsa que se opone a la unidad de Dios y de su Iglesia.
Esto causará el mayor cisma que el mundo ha conocido jamás.
Cuanto más se acerque el momento del fin, mayor será la oscuridad de satanás que se extenderá en la tierra, mayor será el número de los hijos de la corrupción, y el número de los justos en consecuencia disminuirá…”

San Pío X
A principios del siglo XX el Papa vio que la sociedad ya sufría una terrible enfermedad
“Esta enfermedad es la apostasía de Dios y el hombre poniéndose en el lugar de Dios es la marca distintiva del Anticristo… elevándose por encima de todo lo llamado Dios”.
San Juan Pablo II
En 1976, en Filadelfia para el Congreso Eucarístico, siendo todavía el cardenal Wojtyla:
“Ahora estamos parados en frente de la mayor confrontación histórica que la humanidad haya experimentado alguna vez.
No creo que el amplio círculo de la Sociedad Americana o todo el amplio círculo de la Comunidad cristiana sean conscientes de esto completamente. Ahora nos enfrentamos a la confrontación final entre la Iglesia y el anti-iglesia, entre el evangelio y el anti-evangelio, entre Cristo y la Anticristo. La confrontación se encuentra dentro de los planes de la Divina Providencia. Está por lo tanto, en el Plan de Dios, y debe ser un juicio en el que la Iglesia debe asumir y afrontar con valentía…”
Beata Anna Maria Taigi
Esta mística del siglo XIX reveló:
“Naciones enteras se unirán a la Iglesia poco antes del reinado del Anticristo.
Estas conversiones serán sorprendentes. Los que sobrevivan tendrán que comportarse bien. Habrá innumerables conversiones de herejes, que volverán al seno de la Iglesia; todos notarán la edificante conducta de sus vidas, así como la de otros católicos. Rusia, Inglaterra y China entrarán en la Iglesia…”

Fuentes:

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