miércoles, 5 de octubre de 2016

MENSAJES DEL CIELO CONDENAN EL DAÑO A LAS ESTRUCTURAS QUE SUSTENTAN LA VIDA


Estamos modificando las estructuras naturales que sustentan la vida terrícola.
Una parte de la ciencia y la tecnología de está modificando la naturaleza en su base genética.
Y con resultados imprevisibles a mediano y largo plazo.
Porque no se ha estudiado el efecto que esas nuevas criaturas genéticamente modificadas pueden tener sobre los demás seres vivientes.
Incluido el hombre, y sobre las estructuras que sustentan la vida en la Tierra.
La que se ha dado en llamar profecía de 1990, expresa el juicio divino sobre el hombre.
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Que está tratando de reformular la creación a través de la ingeniería genética, y que eso le traerá consecuencias gravísimas.
El mensaje de la profecía de 1990,fue vehiculizada a través de una locución alegadamente divina y se puede ver aquí y aquí; dice:
“Mi mayor enemigo es la ciencia.
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La ciencia que altera la vida, la ciencia que crea un cielo falso.
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La ciencia que labora con el vientre y los genes.
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La ciencia que ha llenado el aire con la fuerza del enemigo.
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La ciencia que crea brujería química y ensucia la tierra.
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La ciencia que trata de crear vida, pero no puede, en realidad, incluso sostenerla.
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La ciencia que se ha negado a Dios”
LA VINCULACIÓN DE LA PROFECÍA CON LA BIOINGENIERÍA
La llamada “profecía de 1990 ” es largamente vinculada a las advertencias sobre la investigación genética.
A menudo interpretada como la clonación y el trabajo con células madre embrionarias.
Pero puede tener otra conexión: el aumento explosivo en los productos elaborados a partir de cultivos con bio-ingeniería.
Los años previos a la locución aludida fueron los decisivos en el desarrollo de técnicas de ADN sofisticadas.
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Que permitieron la transformación genética de plantas y animales.
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Fue también durante este período preciso que funcionarios del gobierno de los EE.UU. aprobaron el uso de hormonas de crecimiento genéticamente alteradas en las vacas lecheras.
Hoy, la bioingeniería de alimentos comprende la mayor parte de nuestro maíz y más de 85 por ciento de la soja, así como un gran porcentaje de las patatas, colza, arroz, pimientos, papaya y otros productos.
Increíblemente, las empresas no están obligadas a informar directamente a los consumidores en las etiquetas sobre la alteración genética.
Cuanta más información sobre la investigación del ADN se conoce, más suena a verdad la alusión a “que alteran la vida” y alarma la profecía, que fue grabada anónimamente el 3 de diciembre de 1990.
Un artículo académico sobre genética cita el crucial período de 1983 hasta 1989 para el desarrollo de las hormonas de crecimiento animal.
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Dos décadas más tarde, nos encontramos en una etapa en que grandes cantidades de productos alimenticios genéticamente modificados se consumen en occidente y en general en todo el mundo, sin información real de su efecto crónico.
“En la década de 1990, se aprobó una ingeniería genética de Pfizer Corporation de cuajo para utilizar en la fabricación de queso, pero recibió poca atención”, señaló la bioanalista Stella G. Alkernes de Massachusetts en un importante informe.
“La Asociación Americana de Medicina y los Institutos Nacionales de Salud de forma independiente concluyen que la carne y la leche de vaca tratadas con [la hormona del crecimiento] rBST eran tan seguras como las no tratadas.
Un año después, la Asociación Americana de Pediatría aprobó la rBST.
En 1993, la FDA dio su aprobación para la rBST en las vacas lecheras.
Investigadores de la Universidad de Cornell han producido rpST utilizada en cerdos para producir carne de cerdo magra.
En 1994, la FDA finalmente aprobó la ‘Flavr tomate Savr‘ de Calgene Coporation, el primer alimento completo de ingeniería genética aprobado por el mercado”.
HA HABIDO INDICIOS CLAROS DEL DAÑO
Esto ocurrió a pesar de los indicios de que los alimentos modificados podrían ser la causa de un brote de alergias, así como otras formas de toxicidad y potencialmente cancerígenos.
A menudo se llaman “alimentos Frankenstein” porque no se sabe cuáles son las repercusiones que podrían tener.
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Increíblemente, genes animales y humanos se han mezclado y transmitido a través de bacterias en el ADN de los cultivos.
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Enturbiando así los límites de la Creación y creando posibles plagas en el futuro.
“Las plantas genéticamente ingenierizadas contienen partículas de virus como parte de una estrategia para mejorar la resistencia.
Lo que podría facilitar la creación de nuevos virus en el medio ambiente”, advirtió la investigadora.
“Las preocupaciones religiosas también son expresadas como algunas otras razones para oponerse a la ingeniería genética de los alimentos.
Por ejemplo, Judios y Musulmanes  pueden ser aversivos respecto a los granos porque contienen genes de cerdos.
Y los vegetarianos pueden oponerse de manera similar a las verduras y frutas que contienen los genes de los animales.”
En algunos casos, genes humanos se han insertado en los cromosomas de plantas para producir grandes cantidades de productos farmacéuticos experimentales tales como la insulina y el suero humano.
Cabras han sido modificadas para producir leche similar a la humana.
La profecía 1990 había advertido que un “nuevo gran mal” llegaría en cuatro años y 1994 se cita como un año crítico en la investigación de la clonación.
Un sitio web de ciencia señala ese año en una línea de tiempo como la “primera clonación avanzada de células de embriones”, así como la aprobación de la investigación sobre creación de embriones humanos por el gobierno federal.
Al parecer una locución posterior al mismo destinatario el 30 de diciembre de 2004 señala:
“El mundo está ahora seriamente fuera del cumplimiento de la Voluntad de Dios, de lo que Él creó y planificó.
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Hay quienes querrían reconfigurar las mismas criaturas que él ha formado, y se entrometen con la textura de la vida.
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Por esta razón, el Señor permitirá una reorientación enorme.
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Si no fuera por la acción de los Cielos, lo que Dios ha creado en la tierra pronto será dañado más allá de la recuperación.
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Un efecto muy dramático ya está en marcha enfocado a las estructuras de apoyo que el hombre llama naturaleza”.
LAS FORMAS EN QUE LOS PRODUCTOS MODIFICADOS GENÉTICAMENTE AMENAZAN A LA HUMANIDAD
Estamos modificando las estructuras naturales que sustentan la vida en la Tierra.
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Y uno de los casos más notorios y de mayor resistencia pública son los organismos genéticamente modificados (OGM) o transgénicos.
¿Por qué son los organismos genéticamente modificados (OGM) una grave amenaza para la humanidad y el medio ambiente?
Las razones abarcan los ámbitos de la ciencia, la justicia social, la economía y el medio ambiente.
Y una vez que entiendas esto, entenderás fácilmente por qué tantos ecologistas, humanistas, científicos responsables y defensores de la justicia social, se oponen firmemente a los OGM.
Aquí están las principales maneras en que los OGM nos amenazan a todos:

Cada grano de maíz transgénico contiene veneno
El maíz GM está diseñado genéticamente para desarrollar un pesticida letal en cada grano de maíz.
Cuando este maíz se cosecha y se convierte en copos de maíz, tortillas de maíz, jarabe de maíz u otros alimentos a base de maíz, ese mismo veneno permanece en el maíz.
Esto mismo se puede decir de la soja, el trigo y todos los demás cultivos genéticamente modificados.
¿Cuál es el efecto en los niños humanos que comen todos los venenos que crecen en el maíz transgénico?
Nadie sabe a ciencia cierta porque no se han realizado pruebas en el consumo humano.
Es por eso que los OGM siguen siendo un experimento no probado que explota a los seres humanos como conejillos de indias.
Ver www.GMOevidence.com para aprender más.

Los OGM nunca han tenido pruebas de seguridad para el consumo humano
Aunque los defensores de los OGM afirman ridículamente que los OGM han sido “comprobados como seguros en miles de estudios”, lo que no dicen es que esos eran todos estudios a corto plazo en animales, no humanos.
De hecho, los OGM no han demostrado ser seguros para el consumo humano a largo plazo.
¿Qué pasa cuando un niño come OGM durante dos décadas? ¿Aumenta considerablemente su riesgo de cáncer, diabetes, insuficiencia renal o futura enfermedad de Alzheimer?
Nadie lo sabe exactamente, porque las pruebas no se han realizado.
Como sucede a menudo con otras sustancias químicas, los OGM se han simplemente soltado en el mundo con una actitud de “¡vamos a ver qué pasa!”
Ver: www.GMOseralini.org para aprender más.
Y ver aquí este impactante hallazgo sobre el resultado del consumo de transgénicos en animales.
Los OGM transforman la libertad cultivo en agricultura de servidumbre
Porque los OGM se venden con una restricción de propiedad intelectual que impide a los agricultores guardar sus propias semillas.
Hay una “servidumbre económica” porque los agricultores se ven obligados a comprar nuevas semillas caras cada año al proveedor de semillas OGM.
Como resultado, ahora están siendo criminalizadas prácticas agrícolas (como la conservación de semillas) que han sido sostenidas por la humanidad desde los albores de la civilización.
Y cuando los cultivos transgénicos fallan, como lo hacen con frecuencia, la carga económica puesta sobre los agricultores es a menudo demasiado difícil de soportar.
Es por eso que los suicidios de agricultores se han disparado en la India entre los agricultores que compraron semillas transgénicas.
Según se informa, más de 270.000 suicidios han ocurrido en la India debido a las malas cosechas.
Obtén más información del informe de OGM Mitos y Verdades.

Los OGM corren el riesgo muy real de contaminación, autorreplicación genética y ecocidio
A diferencia de los productos químicos aislados, los OGM se auto-replican.
Esto significa que hay un riesgo automático de un holocausto ecológico causado por la contaminación genética a partir de OGM.
Científicos llaman a este riesgo “ecocidio” y han calculado el riesgo de ecocidio causado por lo OGM en cerca del 100%. Ver este artículo marzo 2014:
“…los cultivos transgénicos han sido diseñados específicamente para tener una ventaja de supervivencia sobre los cultivos convencionales, lo que les permite resistir mejor las sequías o las infestaciones de plagas o malezas.
Esta ventaja en la supervivencia – si es tan real como afirman los manipuladores de semillas – refiere a que las plantas genéticamente modificadas pueden dejar fuera de competencia a cultivos no OGM en campo abierto.
La contaminación genética que ya está en marcha sólo va a empeorar, y no hay marcha atrás, porque todos los sistemas vivos – incluso los genéticamente modificados – tienen una tendencia natural a extenderse, multiplicarse y sobrevivir”.
El resultado es que los cultivos transgénicos están diseñados para desplazar a los cultivos no modificados genéticamente a través del tiempo.
Debido a esto, el aumento de los OGM es casi sinónimo de colapso de la diversidad genética en las semillas y los cultivos alimentarios.

La agricultura transgénica está creando una nueva generación de súper malezas resistentes a productos químicos
El surgimiento de super malezas resistentes a productos químicos es un problema terrible para los agricultores modernos.
De la misma manera que se han producido superbacterias mortales por el abuso de los antibióticos en los hospitales.
“Frankmalezas” (Frankenweeds) han surgido del contínuo desarrollo de los OGM y la aplicación rutinaria de glifosato a los campos de cultivo.
Super malas resistentes al glifosato se han convertido en un problema tal que la misma industria que alguna vez afirmó que los OGM requerirían “menos químicos” para cultivar alimentos, ahora recomienda campos tratadas con una capa triple o cuádruple de múltiples productos químicos para atacar a las super malas hierbas con diferentes productos químicos.
Es por eso que los expertos en agricultura están en estos momentos dando la voz de alarma sobre el glifosato, OGM y super malas hierbas.
Llamando a poner fin a las prácticas agrícolas OGM insostenibles que amenazan seriamente la sostenibilidad de la agricultura.
Los OGM pueden tener consecuencias no deseadas a largo plazo sobre el medio ambiente
¿Qué sucede cuando las plantas genéticamente modificadas tienen polinización cruzada con plantas no transgénicas y luego se someten a las mutaciones al azar de la evolución de la planta?
Nadie sabe porque nunca ha sido probado en el mundo abierto.
O, mejor dicho, está siendo probado ahora mismo en todos nosotros, en el experimento más grande del mundo genético que se ha realizado (sin nuestro consentimiento, nada menos).
El problema en todo esto es que la madre naturaleza tiene una manera de provocar consecuencias no deseadas.
¿Es posible que un rasgo artificial, de la ingeniería genética pudiera dominar en las futuras generaciones de plantas, y empiece a mostrar un rasgo fisiológico completamente involuntario que los científicos nunca quisieron? Por supuesto que sí.
Desde la talidomida a Fukushima, el mundo está lleno de ejemplos de consecuencias catastróficas que los científicos una vez juraron nunca podrían suceder.
Las famosas últimas palabras son: “¿Qué podría salir mal?”

Colapso de la biodiversidad
En un esfuerzo por monopolizar el suministro mundial de semillas, las empresas de OGM están comprando compañías de semillas más pequeñas y cerrándolas, colapsando los suministros de semillas.
Esta consolidación de las empresas de semillas ha provocado un colapso alarmante de la diversidad de las semillas en la última década, colocando a la humanidad en mayor riesgo de pérdida de cosechas debido a la pérdida de la diversidad genética.
Ese es el problema con la conformidad genética: hace a los cultivos más susceptibles a las enfermedades sistémicas que pueden causar la pérdida catastrófica de cosechas.
Precisamente este escenario ha sucedidocon los cultivos de banano, ya que la mayoría de los árboles de plátano comerciales son genéticamente clones idénticos.
Como resultado, un hongo ha atacado a los cultivos de banano y está causando una destrucción devastadora de la industria del banano.
La industria está respondiendo – ¿adivinen con qué?- tontamente conviertiendo los plátanos a la ingeniería genética.
Los cuales sufrirán de la misma debilidad exacta de conformidad genética, prácticamente garantizada, en una futura epidemia de la enfermedad.

Los OGM ponen el control del suministro de alimentos en manos de las corporaciones con fines de lucro
Antes de la agricultura corporativa, la producción de alimentos solía estar bajo el control de los agricultores locales que se preocupaban por sus familias y comunidades.
Pero ahora, las semillas de los alimentos están monopolizadas por empresas impulsadas por la codicia, que no se preocupan por las familias o comunidades (sino que hacen culto al beneficio a toda costa).
Casi no hace falta decir que estas empresas toman decisiones en el mejor interés de sus accionistas, no en los mejores intereses de la humanidad y el medio ambiente.
Esperar que las corporaciones coloquen la sostenibilidad a largo plazo de la vida en la Tierra como una prioridad mayor que sus propias ganancias trimestrales, es una forma de locura.
Las empresas sólo existen para maximizar las ganancias a corto plazo, sin importar el costo a largo plazo para la humanidad o el planeta.
Los OGM pueden estar dañando los polinizadores
Los OGM podrían estar contribuyendo en el daño a todos los importantes polinizadores, sin los cuales estaríamos todos muertos de hambre por falta de cultivos alimentarios.
Las abejas polinizadoras están muriendo en números récord y muchos científicos temen que podemos estar presenciando un colapso catastrófico de las poblaciones de polinizadores.
La evidencia ya está surgiendo que los neonicotinoides – una clase de productos pesticidas químicos – pueden ser responsables de la caída.
Pero también hay evidencia de que los transgénicos puede estar operando sobre la disminución de la población.
¿Se ha probado el impacto a largo plazo de los OGM en los polinizadores en la naturaleza?
Por supuesto que no. Eso costaría demasiado dinero, y la promoción de los transgénicos es todo acerca de hacer dinero.
“Si la abeja desapareciera de la superficie del globo, entonces el hombre sólo tendría cuatro años de vida libre. No más abejas, no más polinización, no más plantas, no más animales, no más hombre”, Albert Einstein
EL ADN TRANSGÉNICO ENTRA EN EL TORRENTE SANGUÍNEO HUMANO
Se ha realizado hace poco un análisis combinado de cuatro estudios independientes involucrando a más de 1,000 muestras humanas.
Y un equipo de investigadores de las universidades de Hungría, Dinamarca y los EE.UU. observaron el proceso de asimilación de los OMG que se consumen en la actualidad en todo el mundo.
Esto incluye los derivados de cultivos transgénicos como la alta fructosa de jarabe de maíz (JMAF) procedente de maíz transgénico, por ejemplo, y la proteína de soja de la soja GM, así como la carne de animales alimentados con una dieta a base de OMG.
Después de observar los datos sobre cómo el cuerpo humano procesa estas y otras formas de organismos modificados genéticamente, el equipo descubrió que el ADN de los OMG no es completamente descompuesto por el cuerpo durante el proceso de digestión.
Lo que normalmente se debería degradar en componentes más pequeños, como los aminoácidos y los ácidos nucleicos se encontró que  permanece junto.
No sólo esto, sino que estos fragmentos de ADN más grandes se encontraron pasando directamente al sistema circulatorio, a veces a un nivel más alto que el ADN humano actual.
“Basándose en el análisis de más de 1.000 muestras humanas de cuatro estudios independientes, reportamos evidencia de que fragmentos derivados de ADN de la comida lo suficientemente grandes como para transportar genes completos pueden evitar la degradación.
Y por medio de un mecanismo desconocido entrar en el sistema de circulación humana“ explicaron los autores en su resumen del estudio.
“En una de las muestras de sangre la concentración relativa de ADN de la planta es más alto que el ADN humano“.
GENES DE LOS OMG QUE SE TRANSFIEREN AL INTESTINO DELGADO ALTERANDO LA COMPOSICIÓN DE LAS BACTERIAS BENEFICIOSAS
Este es un descubrimiento asombroso que demuestra las falsas afirmaciones hechas por Monsanto (luego comprado por Bayer) y otros, que los transgénicos no son diferentes de los no-OGM en cuanto al cuerpo se refiere.
Monsanto incluso afirma en su página de “Seguridad Alimentaria” para los OMG que el ADN a partir de OMG es “ampliamente digerido” y “no hay riesgos presentes”.
Sobre la base de este último análisis de cómo los genes de alimentos se transfieren desde el tubo digestivo a la corriente sanguínea, ahora es evidente que los genes de OMG pasan al conjunto del torrente sanguíneo.
Su presencia también se asocia con las principales condiciones inflamatorias tales como enfermedad inflamatoria del intestino, adenoma y cáncer colorrectal.
También se encontró que la presencia de genes transgénicos en el intestino delgado afecta la composición de las bacterias beneficiosas.
Las que son responsables de proteger el intestino contra los invasores externos y ayudar al cuerpo a absorber los nutrientes de los alimentos.
Las personas con ileostomías, o perforaciones en sus paredes abdominales como resultado de la cirugía, se encontró que, literalmente, pueden albergar secuencias de ADN completa de OMG en sus tractos intestinales.
Nada de esto se había estudiado legítimamente.
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Las compañías de biotecnología han afirmado siempre que los transgénicos son lo mismo que la comida real.
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Pero sin ninguna evidencia que apoye esto, y esto ha sido suficiente para que algunos gobiernos, especialmente EE.UU., los haya mantenido en el mercado desde hace 20 años.
“Una pequeña mutación en un ser humano puede determinar mucho.
El punto es que cuando se mueve un gen, o una pequeña parte de genes, de un organismo a otro diferente cambia por completo su contexto“, dijo David Suzuki, co-fundador de la Fundación David Suzuki.
“No hay manera de predecir cómo va a comportarse y cuál será el resultado”.
NO HAY JUSTIFICACIÓN RACIONAL PARA PONER AL MUNDO ENTERO EN RIESGO CON LOS CULTIVOS MODIFICADOS GENÉTICAMENTE
Los OGM han fracasado claramente al ser sometidos a pruebas científicas responsables a largo plazo.
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Al igual que con la mayoría de los otros productos químicos – aspartamo, el Agente Naranja, el bisfenol-A y así sucesivamente – la industria simplemente les da rienda suelta en el mundo y espera que nada salga mal.
Pero la ley de Murphy nos dice que cosas malas pueden suceder incluso cuando usted no quiere que pasen.
Y con los OGM, ahora están jugando con organismos auto-replicantes, que son más que meros productos químicos.
La agricultura basada en OGM es una caja de Pandora que no se puede cerrar una vez abierta.
Aunque los OGM podrían desarrollarse un día y desplegarse de una manera segura y prudente, en la actualidad no existe la disposición por parte de las empresas de biotecnología de gastar el tiempo, dinero y recursos necesarios para establecer dicha seguridad.
¿Es a esto a los que se refería la profecía de 1990?
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Probablemente sí, además de los experimentos directos que buscan la clonación humana.
Fuentes:

Foros de la Virgen María
en

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