miércoles, 11 de mayo de 2016

EL EPÍLOGO DE FÁTIMA: MADRE DE LA UNIDAD Y DE LA PAZ DE GHIAIE DE BONATE, ITALIA (13 DE MAYO)


Del 13 de mayo de 1944 al 31 de mayo del mismo año, trece apariciones a Adelaida Roncalli, de siete años con fenómenos en el sol y asistencia de trescientas mil personas el último día. Aprobadas por el Obispo.

“Si no volvemos a Dios en la segunda mitad del siglo XX, persecuciones sangrientas contra la Iglesia, hambre, fuego, odio, sangre; en comparación con eso no serán nada los horrores de la guerra de 1939 al 1945. Los pecados que llevan más almas al infierno son los de la impureza”.

La parroquia de Ghiaie de Bonate se encuentra en la diócesis de Bergamo a aproximadamente a diez kilómetros del pueblo principal. El pueblo toma el nombre de Ghiaie de Bonate, debido a que el suelo es del tipo canto rodado, proveniente del río Brembo.

Ghiaie de Bonate es un fragmento de Bonate Sopra y de, pequeña parte de Presezzo. La parroquia, data de fines de 1921, luego de muchas confrontaciones fue reconocida civilmente, el 29 de marzo de 1944 en las vísperas de las apariciones. Es la única parroquia de la diócesis consagrada a la Sagrada Familia.

El pueblo de Torchio es un pequeño poblado que depende de Ghiaie Bonate alojado a las orillas del Río Brembo, entre una extensión de campos y un enorme plantación de coníferas, que dominando el altiplano de la isla, sirvió de anfiteatro para las inmensas muchedumbres que concurrían durante las apariciones.

De hecho, del 13 de mayo al 31 de julio de 1944, en este pequeño pueblito de la Bergamasca, más de tres millones de peregrinos vinieron de todas partes en diferentes tipos de medios, sin tener en cuenta el gran peligro de la guerra, debido a los continuos bombardeos y a las ráfagas de las ametralladoras que reinaban allí poniendo sus vidas en peligro.

En este pueblito desconocido para el mundo, una tarde de mayo de 1944 el día 13, se le aparecía por primera vez Nuestra Señora a una pequeña niña de 7 años. La aparición en Ghiaie de Bonate se definió como “El epílogo de Fátima”.

PUNTOS CENTRALES DEL MENSAJE DE BONATE


Cesación del pecado: Particularmente del pecado de impureza. “Son éstos los que arrojan más almas al infierno… es necesario que eviten estos pecados graves que limitan la familia. Muchos niños defectuosos lo son por causa de las faltas de su madre. Esta guerra la última (1939-1945) ha sido causada en gran parte por los pecados de la mujer, especialmente por el de inmoralidad”.
Cesación de la blasfemia: Bajo todas sus formas, de las que la más general consiste en criticar contra la conducta de la Providencia; se nos castiga porque hemos pecado.
Oración y penitencia: Recitación ferviente y frecuente del Rosario con la meditación de los misterios. “Es precioso que todo el mundo ore para la pronta cesación de penas y dolores. La gran penitencia que se impone a todos, es la completa fidelidad a los deberes de estado, considerados como la manifestación tangible de la voluntad de Dios sobre nosotros. Es todavía difícil que el mundo obtenga la paz, porque todavía se mantienen lejos de la fe y de la santidad, tan sólo la oración y la penitencia lo podrán salvar. Todos, buenos y malos, oren incansablemente por el mundo martirizado”.

LA HISTORIA

Adelaide tenía entonces siete años. Nació el 23 Abril de 1937 en el pueblo de Torchio y fue bautizada el 25 de Abril de 1937, por el sacerdote Don Cesare Vitale. Cursó la escuela elemental (Primaria). Era una niña plena de salud y muy vivaz, le gustaba jugar como cualquier niña de su edad.

Nada hizo pronosticar esa tarde del 13 de mayo de 1944 que la Sagrada Familia se le aparecería a esta niña, cuyo nombre no sólo habría cruzado los confines de Italia sino también los de toda Europa.

Mientras el mundo se quemaba entre las llamas del odio, las armas y la guerra esa situación parecía nunca acabar.

Nuestra Señora, la Madre de la Unidad y Reina de la Paz, escogió a una muchacha joven y simple de Bonate, Adelaide Roncalli, quién fue la elegida para lanzar los mensajes de Nuestra Señora al mundo. Ella aparecía durante trece días en dos ciclos; el primero del 13 al 21 de mayo, y el segundo de 28 al 31 de mayo.

La Señora le dijo:
“Tú sufrirás mucho, pero no llores, porque después tú vendrás conmigo al paraíso”. “En este valle de verdaderos dolores tú serás una pequeña mártir … “

El 12 de Julio de 1946, negó la retractación que le habían dictado y procedió a reafirmar la veracidad de las apariciones por escrito, pero desgraciadamente no tuvo los resultados esperados. Desde el 30 abril de 1948, el Obispo de Bergamo, Monseñor Bernareggi envió adelante el decreto de “No Consta” prohibiendo todo tipo de devoción a las Apariciones de Nuestra Señora, de Ghiaie de Bonate. Movida de aquí y para allá, contra su voluntad, sin saber sus padres de esto fue burlada y calumniada. Adelaide soportó y llevó esta cruz fuera de su casa.

A la edad de 15 años, obtuvo del obispo el permiso para entrar en el convento de las Monjas Sacramentine de Bergamo. Muerto el obispo, alguien tuvo éxito de resurgir los acontecimientos de 1944, hacerla renunciar al convento y fue obligada a abdicar de sus ideas que la Virgen María había manifestado en ella. Esta renuncia le trajo mucho sufrimiento y una la larga enfermedad.

Cualquier adolescente de su edad hubiera salido destruida de una vivencia como la suya, pero Adelaide era fuerte y se reafirmó. Se cansó de esperar que la puerta del convento se volviera a abrir, y optó por casarse, se fue a vivir a Milán, dónde consagró su vida a su profesión que era la de enfermera cuidando con mucho sacrificio y amor a sus pacientes. Los años pasaron y Adelaide guardaba el silencio impuesto por su superior.

LAS RECUPERACIONES

Muchos fueron los testimonios de enfermos recuperados durante y después de las apariciones. Las recuperaciones diferentes eran instantáneas, perfectas e inexplicables. Durante ese período, se fundó una oficina especial para las investigaciones de costumbres.

En el decreto del obispo se lee: “Con esto nosotros no pensamos excluir que Nuestra Señora, confiadamente invocada por tantos en su buena fe sostuvieran que la aparición en Ghiaie, que podría conceder gracias especiales y no ordinarias recuperaciones, premiando de tal manera la devoción hacia Ella”.

Según sólo las afirmaciones, de la gente común, permanecen dos dudas persistentes.

1) Los tantos pacientes, recuperados inexplicablemente desde el 13 de mayo de 1944 hasta el fin del juicio del obispo el 30 de abril de 1948 porque los enfermos llegados “en buena fe” a Ghiaie de Bonate (no conocían la posición de la Iglesia en merito a las Apariciones), si realmente nada especial pasó en Ghiaie de Bonate, ellos no hubieran soñado acercarse a orar a la Virgen y pedirle gracias en aquel lugar desconocido. ¿Todas esas recuperaciones habrían pasado? ¿Cuándo?

2) Para todos ellos que, desde 1948 a hoy, no más “que no se evidencia la existencia de la buena fe” (porque al conocimiento del “no consta” y de las prohibiciones del decreto Episcopal), en vez ellos han creído en la inocencia de una niña de siete años, van en peregrinación al lugar de las apariciones y ellos han orado por si solos o en grupo, con o sin la presencia de sacerdotes, han invocado la ayuda de Nuestra Señora de Ghiaie de Bonate o Reina de las Familias. De ella específicamente se reciben gracias especiales o recuperaciones, como ellos considerar recibir las gracias obtenidas mediante sus ruegos.

PIO XII Y JUAN XXIII

En el año 1949, un año después de la publicación del decreto Episcopal, el Papa Pío XII recibió en audiencia privada a la niña Adelaide Roncalli la cual revelo el secreto a el reservado que la Virgen le había confiado el 17 de mayo 1944 durante la quinta aparición.

El Papa, recibiendo a Adelaide, manifestó creer en las apariciones de Ghiaie de Bonate ciertamente; ¿por otra parte habrían empujado a ese gran pontífice a recibir a la niña, visto el “no consta” en el decreto Episcopal?

En la fecha 8 de julio de 1960, el Papa Juan XXIII envió a una carta a monseñor Jóse Battaglia Obispo de Faenza “Acerca de lo sucedido en “Ghiaie”.

Carta Reservada del 8 de Julio de 1960:
Estimada Excelencia, nosotros estamos unidos por el buen pensamiento del corazón y la oración. Referente a lo sucedido en Ghiaie usted entiende que no se debe comenzar desde el vértice, si no desde la base: y no se debe hablar sin conocimiento sin antes haber escuchado pronunciar la última palabra. Más que lo sustancial se debe tener en cuenta las circunstancias han sido estudiadas. Lo que merece la pena en “subiecta materia” que es el testimonio de la vidente: y la afirmación que todavía mantiene a los 21 años y en conformidad de la primera afirmación a los 7 años: y retirada por las amenazas, y los miedos del infierno la hechos por alguien. Me parece justo insistir en aquellas incisivas amenazas recibidas. Sin embargo Vuestra Señoría , que entiende que no es práctico, ni útil, que el primer paso para una revisión del suscripto dado que espera el “verbum” para la Congregación de los Ritos, o de otro ministerio que a su tiempo “faciat verbun cum S.S.” etc. Perdone la simplicidad de mis palabras. Y espero que nos encontremos siempre bien “in laetitia et benedictione” aun cuando “dies mali sunt”.
Aff. mo Io. XXIII”.

El Padre Pío les habría dicho a las personas de Bonate porque habían ido por él a Petralcina: “¿Pero qué cosa viene hacer, aquí, si usted allí tiene en su casa a Nuestra Señora de Bonate?”

LA PETICIÓN DE 1974 AL OBISPO

En el trigésimo año de las apariciones, el Señor Cortinovis presentó al obispo monseñor Clemente Gaddi una petición acompañada por 7000 firmas de creyentes que manifestaron el deseo de orar, con el consentimiento del obispo en el lugar de las apariciones.

Monseñor Gaddi respondió que no podría volver a abrir el caso si en su presencia no había elementos nuevos, serios y graves que permanecieran en vigor las disposiciones de los obispos que el había precedido, pero agregó que sin embargo no pudo prohibir, ni impedir a personas simples o a los grupos de personas de llegar al lugar para Orar a la Virgen.

LA REAFIRMACIÓN SOLEMNE

Finalmente, valiéndose de la ley de los decretos del Concilio Vaticano II sujeto a la información, Adelaide se siente descargada de las prohibiciones que le habían sido impuestas y se definió por reafirmar solemnemente y oficialmente, delante de notario, la veracidad de las apariciones.

El día 20 de Febrero de 1989 declara cuánto sigue: “Yo Roncalli Adelaide, nacida en la Ghiaie de Bonate Sopra (Bergamo) 23 de abril de 1937, a 45 años de las apariciones, vuelvo para declarar, como ya lo he realizado más de una vez, en ocasiones precedentes que se convenzan que tuve las Apariciones de Nuestra Señora en Ghiaie de Bonate desde el 13 al 31 de mayo de 1944, cuando yo tenía siete años. Las historias que he vivido dolorosamente desde entonces, las ofrezco a Dios y la Autoridad legítima de la Iglesia a los que solo pertenece reconocer o no, en cuánto a mí conciencia tranquila y en la posesión más segura de mis facultades mentales yo sostengo que es la verdad.
En la fe Adelaide Roncalli
20 de Febrero 1989. .”

LA ENSEÑANZAS DE LA VIRGEN DE BONATE

Hoy la familia es a menudo incapaz de resolver sus propios problemas. No hay más comunicación, hay muchos conflictos entre los consortes, entre los padres y niños. Las ideas y los estilos de vida son introducidos por una sociedad violenta llena de permisividad y de consumismo dónde todo se profana. Las personas jóvenes, no tienen proyectos, dejándose llevar por modas más destructivas que no ayudan a que distingan el bien del mal, están desconcertados y descorazonados hacia los otros y hacia ellos mismo. La familia de hoy ya no sirve como el filtro y no propone los valores propios.

El matrimonio no es una aventura, no es una experiencia para tomar con ligereza. Es una responsabilidad grande hacia Dios y hacia el prójimo. Educar a los hijos, no es fácil. Con los mensajes de Ghiaie de Bonate, la Virgen nos enseña que todavía no se puede ser una familia santa sin vivir en confianza entre las manos maternales de Nuestra Señora.

LA UNIDAD Y LA SANTIDAD DE LA FAMILIA

La visión de Adelaide, en la 9° aparición, es simbólica y contiene todas las enseñanzas alrededor de la santidad remarcando las cuatro virtudes esenciales de una familia: la paciencia, la fidelidad, la mansedumbre y el silencio familiar. Es una obra maestra auténtica de bondad divina.

La pareja de palomas representa a los dos miembros principales de la familia, la Sagrada Familia, el ejemplo tipo para cada familia. El caballo o cabeza de familia , dominadas por la tentación, el abandono de la oración, se levanta, y pasa por detrás de la espalda de Nuestra Señora, y se dirige hacia la puerta abierta (la libertad que Dios da a cada criatura), y el se dirige hacia el campo de azucenas que él quiere destruir.

La oveja blanca, el otro consorte, se queda en la iglesia, en oración con las dos virtudes,: el perro manchado (la fidelidad traicionada), el asno gris (la paciencia penitente que deben practicar los consortes).

La oración, el valor de la fidelidad ofendida y la paciencia penitente según Dios que envía a San José de ayuda, va sorprender al animal y a traerlo con la dulzura, el perdón a la oración. De esta manera la unidad y la santidad de la familia que se recompone.

 

LOS DEBERES DE LOS HIJOS

“Tú tienes que ser buena, obediente y respetuosa con el prójimo y sincera: reza bien y vuelve siempre a este lugar durante nueve tardes a esta hora…” (1°)

“Tú tienes que ser buena, obediente, sincera y rezar bien, ser respetuosa con el prójimo”. (2°)

También los niños tienen que colaborar para el bien de la familia. En las primeras dos apariciones la Virgen demuestra para los niños y los más grandes un programa concreto de vida familiar que pone en evidencia los siguientes deberes: la bondad, la obediencia, el respeto hacia el prójimo, sinceridad y oración.

LA ORACIÓN Y LA PENITENCIA

“Dile a los tuyos que si quieren a sus hijos, ellos deben hacer mucha penitencia, orar mucho y evitar ciertos pecados. Si los hombres hacen penitencia la guerra acabará en dos meses, si hacen lo contrario durará poco menos de 2 años “.(3°)

“Ora por los pobres pecadores que necesitan la oración de los niños”. (4°)

“Oración y Penitencia” y luego agrego, “Ruega por los pobres pecadores más obstinados que están muriendo en este preciso momento clavando espadas en mi Corazón”. (5°)

“La oración que más me agrada es el Ave María”. (6°)

“También ora por el Santo Padre, que esta pasando momentos muy feos”. (10°)

“Ora mucho por esas personas que tienen el alma enferma; Porque mi hijo Jesús murió en la cruz para salvarlos. Muchos no entienden estas palabras de mí y por esto sufro mucho”. (11°)

“Ruega por el Papa y dile que pronto yo deseo estar presente en este lugar para todos. Cualquier cosa que se me pida yo intercederé ante mi hijo.” (13°)

La Virgen vuelve a exhortar a las familias y al rezo y hacer penitencia para la salvación de la institución familiar. Es necesario orar bien y permitir que los niños recen, porque su oración es inocente y es la, requerida por Nuestra Señora, rescatará a los pecadores pobres. También la guerra es la causa y fruto de tantos pecados y exhorta hacer la penitencia y orar para la paz.

LA MEDITACIÓN

“Medita estas palabras todos los días de tu vida, hazte de coraje en todas las penas”. (7°)

“Mañana será la última vez que yo te hable entonces durante siete días yo te permitiré, pensar bien todo lo que te he dicho. Trata de entenderlo bien porque cuando tú seas más grande te servirá mucho sí quieres ser toda mía”. (8°)

La Virgen también nos invita a reflejar en lo que le ha dicho a Adelaide. Maestra de vida espiritual, quiere que nosotros entendamos bien las cosas que nos ha enseñado, porque estas serán muy útiles para nuestro largo camino hacia la salvación.

EL AMOR HACIA EL PRÓJIMO

“Tú tienes que ser buena, obediente, respetuosa con el prójimo y sincera: reza bien y vuelve siempre a este lugar durante nueve tardes a esta hora”. (1°)

“Tu tienes que ser buena, obediente, sincera y rezar bien, y ser respetuosa con el prójimo”. (2°)

“La paz no tardará, pero mi corazón anhela para el mundo que todos se amen como hermanos”. (10°)

EL SUFRIMIENTO

El sufrimiento de Nuestra Señora

“Ruega por los pobres pecadores más obstinados que están muriendo en este preciso momento clavando espadas en mi Corazón”. (6°)

“Ora por los pecadores obstinados que hacen sufrir mi corazón porque ellos no piensan sobre la muerte” (10°).

“Ora mucho por esas personas que tienen el alma enferma; Porque mi hijo Jesús murió en la cruz para salvarlos. Muchos no entienden estas palabras de mí y por esto sufro mucho”. (11°)

El sufrimiento del Papa y la Iglesia

“También ora por el Santo Padre, que esta pasando momentos muy feos. Tantos son los que lo maltratan y muchos son los que atentan contra su vida. Yo lo protegeré y Él no saldrá del Vaticano. La paz no tardará, pero mi corazón anhela para el mundo que todos se amen como hermanos. De esta forma el Papa sufrirá menos”. (10°)

El sufrimiento de Adelaide

“Tú sufrirás mucho, pero espera no llores por que después tú vendrás conmigo al Paraíso!”. (2°)

“Medita estas palabras todos los días de tu vida, hazte de coraje en todas las penas”. (7°)

“Querida niña, tú eres toda mía y también eres querida en mi corazón, mañana yo te dejaré en este valle de llanto y de dolor. Me volverás a ver en la hora de tu muerte y envuelta en mi manto yo te llevaré al cielo. Contigo llevaré a los que te comprenden y sufren”. (12°)

“Querida hija, me duele dejarte, pero mi tiempo ha pasado, no te preocupes que por un tiempo no me verás. Piensa sobre lo que yo te he dicho; en el tiempo de tu muerte tú me volverás a ver. En este valle de verdaderos dolores tú serás una pequeña mártir. No pierdas coraje, desea muy pronto mí triunfo”. (13°)

“Yo seré tu recompensa y el martirio será alegre. Estas mis palabras serán de consuelo en esta prueba. Lleva todo con paciencia que tu entrarás conmigo en el paraíso. Alégrate que nos veremos de nuevo pequeña mártir”. (13°)

El sufrimiento de los enfermos

“No, no es necesario que realmente todos vengan aquí, aquellos que puedan que vengan, según los sacrificios que hagan serán sanados o seguirán enfermos, pero que traten de no cometer pecados más graves”. (6°)

“Los enfermos que desean recuperarse tienen que tener mayor confianza y santificar su sufrimiento si quieren ganar el cielo. Si no hacen esto, no tendrán el premio y se los castigará severamente. Yo espero que todos aquellos que conozcan mis palabras harán un mayor esfuerzo para ir al Paraíso”. (11°)

El sufrimiento del alma

“Ora mucho por esas personas que tienen el alma enferma; Porque mi hijo Jesús murió en la cruz para salvarlos. Muchos no entienden estas palabras de mí y por esto sufro mucho”. (11°)

LA PAZ

“Si los hombres hacen penitencia la guerra acabará en dos meses, sí hacen lo contrario durará poco menos de 2 años”. (3°)

“Ora para los pecadores obstinados que hacen sufrir mi corazón porque ellos no piensan sobre la muerte. También ora por el Santo Padre, que está pasando momentos muy feos. Tantos son los que lo maltratan y muchos son los que atentan contra su vida. Yo lo protegeré y Él no saldrá del Vaticano. La paz no tardará, pero mi corazón anhela para el mundo que todos se amen como hermanos. De esta forma el Papa sufrirá menos”. (10°)

NO HAY PECADOS GRAVES

“Tantas Madres tienen sus hijos deformes por los pecados serios que han cometido” “No cometan más pecados y sus hijos se curarán”. (4°)

“Ruega por los pobres pecadores más obstinados que están muriendo en este preciso momento clavando espadas en mi Corazón”. (6°)

“No, no es necesario que realmente todos vengan aquí, aquellos que puedan que vengan, según los sacrificios que hagan serán sanados o seguirán enfermos, pero que traten de no cometer pecados más graves”. (7°)

“Ora para los pecadores obstinados que hacen sufrir mi corazón porque ellos no piensan sobre la muerte” (10°).

“Ora mucho para esas personas que tienen el alma enferma; Porque mi hijo Jesús murió en la cruz para salvarlos. Muchos no entienden estas palabras de mí y por esto sufro mucho”. (11°)

Mucha parte de las enfermedades de los bebés es debida a las malas inclinaciones de los padres (la droga, sexo, el alcohol,…) y esto es herencia de los malos hábitos y el castigo. Los principios éticos fueron caducos y ciertos pecados (el anticoncepcionismo, el aborto premeditado, divorcio y relaciones extramaritales) esto fue obtenido de lleno por ley terrenal por parte de los ciudadanos. Y ahora, se ha caído en la falta de respeto por la vida, es el giro de la eutanasia empujado por la lógica inexorable del ateísmo de un sector de la sociedad. ¡La Virgen nos había advertido y nos había dado un mensaje premonitorio!

LA CONVERSIÓN

“… muchos se convertirán y yo seré reconocida por la iglesia”. (7°)

EL TRIUNFO

“… y yo seré reconocida por la iglesia”. (7°)

“No pierdas coraje, desea muy pronto mí triunfo. Ruega por el Papa y dile que pronto yo deseo estar presente en este lugar para todos”. (13°)

EL ARREPENTIMIENTO Y LA REPARACIÓN

“Aquellos que voluntariamente te hagan sufrir no entrará en el paraíso, si primero no reparan profundamente lo que te han hecho.” (13°)

Es una advertencia grave que pesa sobre todos y sobre todo aquellos que en el año 1944 estuvieron frente a tantas pruebas comprobadas que han contribuido voluntariamente y siguen contribuyendo todavía a oponerse a lo que era la inocencia de una niña de siete años. Las palabras de advertencia de la Virgen pesan en general como un canto rodado en la historia de las apariciones de Ghiaie de Bonate.

Meditemos aún y demos nosotros la bienvenida a esta invitación, al arrepentimiento y la reparación.

Miserere nostri Domine, Miserere nostri.

Fuentes:


Foros de la Virgen María

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