lunes, 18 de abril de 2016

EL PROCESO HISTÓRICO QUE ESTÁ PRODUCIENDO LA RENUNCIA DE LOS CRISTIANOS AL MUNDO


Los católicos están viendo cómo en la última década el maligno bulle a cada vez mayor temperatura incluso dentro de la Iglesia, la persecución a los cristianos se ha desatado sangrientamente en oriente y más sutilmente en occidente, y la Iglesia enfrenta tal diferencia de opiniones entre obispos, sacerdotes y laicos, que parece estar a las puertas de un cisma en el próximo Sínodo.

En este clima de incertidumbre es que están surgiendo propuestas teóricas de abandonar la vida en esta sociedad y pasar a una vida más pura, menos mundana y en algunos casos eremítica. Pero lo interesante es que esto no solo es teoría, se está gestando ya un movimiento espontáneo de eremitas en occidente, tal cual sucedió en la época de San Benito.

Esto tiene puntas que van desde lo político a lo meramente vivencial. Leer también: Cuatro Opciones para Hacer Frente a la Cultura que va Marginando a lo Católicos

EL MALIGNO BULLE CADA VEZ A MAYOR TEMPERATURA

El mal ascendente que nos rodea es ahora extraordinario. Es como un volcán en erupción. El mal ya está bien y lo que era el bien ahora es el mal (como fue profetizado). ¿Debería sorprendernos?

Hay mucha desorientación en nuestro tiempo. El caballo que estaba en el establo se está convirtiendo en el caballo del Apocalipsis.

Irlanda, uno de los países con más católicos en el mundo, vota abrumadoramente para permitir el matrimonio del mismo sexo. Los medios de comunicación se regocijan con los “médicos altruistas” que realizan abortos tardíos (dolorosos para el bebé) y con los “héroes” que cometen eutanasia, y nuestros hijos se están dedicando a jugar a Charlie Charlie Challenge que invoca demonios.

Es la “hora del poder de las tinieblas”, como la Virgen lo llamó.

Los derechos de los transgénero y de los homosexuales son hoy más importantes y están más protegidos que los de cualquiera otra clase de personas y están arremetiendo contra los derechos religiosos. Y un profesor de Princeton aboga por matar a las personas con discapacidad.

Seguramente tú puedes hacer una lista kilométrica de las sendas equivocadas por las que transitamos hoy.

Nuestros corazones deben estar abiertos a todos pero se necesita un amor que implique decir las cosas como son, tener la capacidad de interpelar al mundo. Y este es el punto de la discordia que separa a los católicos. Unos dicen hay que acoger a todos por misericordia y no juzgar a nadie, mientras otros dicen que hay que avisar a los pecadores y tratar que no contaminen la santidad de los demás que están en camino.

Con la Santísima Madre y la Preciosa Sangre de Jesús, no tenemos nada que temer. Sabemos el final del juego. Sabemos que mucho en la vida es una prueba de amor y de fe.

Pero también sabemos que Jesús vino a romper el dominio del diablo. Fue su misión central y también es la misión de todo cristiano.

Y debemos ver que esta enorme desorientación masiva que todos sufrimos, es un signo de mal.

Las desorientaciones son en todos los niveles y en todos los ámbitos de la vida. Y todo ello, con Cristo, puede ser derrotado.

LA PERSECUCIÓN A LA IGLESIA CATÓLICA EN OCCIDENTE

Otro hecho que marca la diferencia es como se sitúan los católicos ante la persecución de la Iglesia Católica y otras instituciones religiosas moralmente conservadores que ha comenzado en Occidente. No es gracias a Dios persecución sangrienta como la persecución de los cristianos en muchos países musulmanes. Pero es una persecución real pero sutil, y probablemente empeore.

Esta nueva persecución actualmente es a dos puntas.

Una consiste en presionar a los creyentes religiosos individuales a cooperar con las políticas públicas contrarias a la fe.
La otra punta es la presión dirigida a los grupos y las instituciones religiosas para adaptar sus programas a la promoción de los valores hostiles a las convicciones morales de los patrocinadores.

¿Por qué debería la Iglesia Católica, en sus propias escuelas, estar obligada a proporcionar una plataforma para la enseñanza que contradice la doctrina moral católica? Sin embargo, esto es lo que grupos de católicos progres requieren de la Iglesia.

En una charla a los seminaristas de su diócesis, el arzobispo Charles Chaput de Filadelfia señaló que la fuerza impulsora que está detrás de la nueva persecución es el colapso radical de consenso moral, que se refleja en una crisis desastrosa del discurso moral público.

“El mayor problema que enfrentamos como una cultura no es el matrimonio gay o el calentamiento global. No es la financiación del aborto o de la deuda federal. El problema más profundo, el que nos está paralizando, es que usamos palabras como justicia, derechos, libertad y dignidad sin ningún significado comúnmente compartido… Nuestros debates más importantes se reducen a quien puede desplegar las mejores palabras de mejor modo para conseguir el poder”.

Esto mismo sucede dentro de los católicos. Se está desvaneciendo la unidad de conceptos morales compartidos.

Y lo peor del caso aún no ha llegado.

¿ES HORA PARA LA OPCIÓN DE LOS BENEDICTOS?

El poeta TS Eliot predijo que, tras la desintegración de la sociedad occidental, la civilización sería conservada y restaurada por un nuevo movimiento monástico. ¿Estaba prediciendo nuestro tiempo?

No, se refería a los hechos ocurridos en el final del siglo V, cuando San Benito de Nursia abandonó el decadente Imperio Romano y estableció las pequeñas comunidades de hombres y mujeres dedicados a la oración, el trabajo y el estudio. Ver aquí sobre la Medalla de San Benito.

En días de Benito de Nursia, el otrora gran imperio romano se había derrumbado en el caos. A través del desastre económico, el hambre, la peste, la decadencia moral y la corrupción política, la sociedad se había vuelto vulnerable y los bárbaros invadieron desde el norte y el este, sintiendo el botín que les esperaba.

En medio de esta desintegración moral y social, Benito estableció comunidades centralizadas de discípulos, y la semilla de su vida y obra, finalmente floreció en la fuerza y a gloria de la Europa cristiana.

El periodista Cristiano Ortodoxo Oriental Rod Dreher ha estado escribiendo desde hace algún tiempo sobre el colapso del cristianismo en Occidente y ha estado prediciendo y pidiendo lo que él llama la “Opción de Benito”. Él imagina un movimiento de base que se base en el testimonio de San Benito; a esto le llamamos nosotros la “Opción de los Benedictos”, porque Benedicto XVI la aggiornó recientemente.

Dreher escribe:

“En nuestro tiempo, la opción de San Benito no ofrece una fórmula (al menos no todavía), pero requiere de un cambio radical de perspectiva entre los cristianos, en la que nos veamos a nosotros mismos como viviendo en las ruinas de la civilización cristiana y con la tarea de preservar viva la fe a través de la próxima Edad Oscura”.

De este cambio radical en el catolicismo ha hablado otro famoso Benito, el Papa Benedicto XVI predijo:

“Nos encontramos en un enorme punto de cambio en la evolución del género humano. Un momento con respecto al cual el paso de la Edad Media a los tiempos modernos parece casi insignificante”.

La Iglesia:

“Ya no será capaz de habitar los edificios que construyó en tiempos de prosperidad. Con la disminución de sus fieles, también perderá gran parte de los privilegios sociales”.

Y el resultado será:

“Una Iglesia más espiritual, que no suscribirá un mandato político coqueteando ya con la izquierda, ya con la derecha. Será pobre y se convertirá en la Iglesia de los indigentes”.


Otros han notado el final de “catolicismo informal” y el aumento necesario del “catolicismo comprometido”. Libros importantes sobre la Nueva Evangelización, como el de Sherry Weddell Formando Discípulos Intencionales, requieren un nuevo tipo de misión para los católicos.

¿CÓMO PUEDE SER UNA PARROQUIA DE LA “OPCIÓN DE LOS BENEDICTOS”?

Esta opción requiere un cambio radical del catolicismo abierto de cafetería frecuente en gran parte de occidente, hacia un catolicismo intencionadamente informado y consciente. Todos serán bienvenidos, pero se dará la bienvenida a unirse especialmente a los que van a ser más como una fuerza de combate de élite que a quienes lo ven como un club de campo con temática religiosa.

Si Dreher está en lo correcto, entonces la opción de Benedicto no se impone desde la jerarquía, sino que va a surgir desde abajo. Tal movimiento sería tradicional, mientras que al mismo tiempo viviría muchos de los principios del Concilio Vaticano II.

Quizás la “Opción de los Benedictos” socavaría el clericalismo de una manera positiva y creativa. Habría renovación natural de la adoración, de la educación religiosa y del servicio en función de las necesidades de la comunidad local, en lugar de que sean de arriba hacia abajo que circulen las “buenas ideas”.

El pastor y la gente decidirían las prioridades en función de las necesidades inmediatas de los miembros de la parroquia.

En la medida que crecezca la hostilidad de aquellos fuera de la Iglesia, las relaciones de confianza se desarrollarán dentro de la familia y de la parroquia.

Si una agenda secular agresiva se promueve en las escuelas, la escuela parroquial y el programa de educación religiosa se convertirán en la prioridad principal.

Como desaparecerá educación clásica, la escuela parroquial se convertirá en un repositorio para el saber antiguo. Como tal, una parroquia de la “Opción de los Benedictos” se vería a sí misma como en lucha contra la cultura, en lugar de acomodarse a la cultura circundante.

Dicha comunidad sería distintiva y clara en sus propósitos y principios. Sus miembros podrían desconfiar de aquellos fuera de la comunidad, incluyendo otros católicos que se han comprometido con la cultura imperante.

¿Es la Opción de los Benedictos el camino del futuro para los conservadores?

No solo es una opción de futuro sin que ya está aquí.

Un gran número de los católicos progresistas no ven ningún problema en que las parejas divorciadas y vueltas a casar lleguen a la comunión, aceptan el “matrimonio” entre personas del mismo sexo y quieren que la Iglesia se acompase a “los tiempos” sobre muchos otros temas morales.
Algunas parroquias irán con la guía de su pastor por el camino de acomodarse y aceptar las tendencias culturales actuales. Mientras tanto, otros pastores conducirán a su grey a un catolicismo más inflexible e interpelante.

Ya los católicos no serán leales a sus parroquias geográficas, y estarán surgiendo parroquias de la “Opción de los Benedictos”, de una manera no consciente, pero serán parte de un creciente movimiento.

Estas parroquias de discípulos intencionales son parte de otra de las tendencias identificadas por George Weigel en su libro Catolicismo Evangélico. Él reconoce que este tipo de personas y parroquias serán vibrantes en su compromiso con la plenitud de la fe católica.

Se componen de católicos bien catequizados, que se comprometen a estar atentos a los signos de los tiempos y listo para vivir su fe en medio de la crisis inminente.

Weigel ve este desarrollo como un aumento positivo de la fe y la renovación de la Iglesia.

El proceso está en marcha, responde a fuerzas históricas y a potencias más allá de nuestro entendimiento; era inevitable independientemente del Sínodo de la Familia y de que algunos dentro de la Iglesia hayan abierto una rendija de la puerta, por ejemplo, para acoger a quienes tienen un estilo de vida gay.

ESTÁ SUCEDIENDO ESPONTANEAMENTE CON LOS NUEVOS ERMITAÑOS DE HOY DÍA

Lo dicho anteriormente ya está funcionando a nivel de personas sin tomar en cuenta los movimientos políticos parroquiales y la política dentro de la iglesia católica.

Aunque se pudiera pensar en los ermitaños como reliquias del pasado medieval de la Iglesia, hoy en día hay muchas personas que dedican su vida por completo a la oración solitaria. Se han retirado de la vida del mundo.

Viven en oración, buscan la soledad y el silencio y huyen de cualquier tipo de publicidad. Son personas que caminan en sentido contrario a la sociedad mundana, y está ocultos para el resto del mundo, pero son significativos para la Iglesia y para Dios.

No se sabe cuántos son por su discreción y no estamos hablando de los silenciosos monjes cartujos, ni de los estrictos camaldulenses, sino que son los nuevos ermitaños.

Hoy la tendencia a escaparse del mundo que aprisiona son muchas, y hay muchos que deciden aislarse pero no con un fin religioso de adoración a Dios, sino con el fin de hallar la paz.

En el caso de Japón se ha desarrollado toda una corriente de jóvenes ermitaños, sin vinculación religiosa, que se les llama hikikomori. Estos jóvenes se retiran completamente de la sociedad y permanecen en sus casas durante más de seis meses o por muchos años.

UN FENÓMENO CRECIENTE

Desde fines del siglo pasado, los ermitaños crecen indiscutiblemente. Muchos de ellos habitan en lugares apartados.

Pero desde hace unos años ha surgido un nuevo modo de vivir la vocación de la soledad: el eremitismo urbano.

El ermitaño de las ciudades vive su fuga del mundo en los núcleos urbanos. Y quizás no haya mejor lugar para conservar el anonimato que en medio de grandes volúmenes de gente que implican las grandes urbes.

Las excesivas praxis comunitarias han producido en algunos el redescubrimiento de la fuerza de la oración y del silencio.

Pero se ha dado también en fenómeno del ermitaño a tiempo parcial, intermitente, que se dedica a la vida solitaria los fines de semana y cuando no trabaja.

Incluso hay quienes no pueden abandonar su vida laboral y tienen planes eremíticos para cuando se retiren y así desarrollar su vocación, a fin de no caer en la indigencia por falta de dinero.

También hay quienes sobreviven con pequeños trabajos, algunos artesanales, pero es difícil trazar una ocupación laboral definida porque es muy casuístico.

El sociólogo Isacco Turina de la Universidad de Bolonia, hizo un estudio sobre los “nuevos ermitaños”, con las dificultades del caso para localizarlos y para que accedan a una entrevista luego, porque prefieren la soledad.

Y en su estudio ha descubierto que

  • No quieren asistencia médica: “Dios tiene el poder para hacerme vivir o morir si caigo enfermo”.
  • No quieren automóvil: “es una pérdida de tiempo”.
  • Una de las pocas actividades mundanas que realiza es ir de compras al supermercado: “es el único momento en que saludo a las personas, me piden que rece por algún familiar, y además, así saben que existo no sólo para mí, sino también para ellos”.
  • Muchos viven de la limosna: “no tengo dinero, nadie me paga por rezar, pero confío en Dios y nunca voy a comprar para comer, vivo de limosna…”

Los nuevos ermitaños viven solos, o con otra u otras personas, en comunidades más bien pequeñas.

Hay un blog en español llamado Solitarios en Silencio que puede ser leído para conocer más de esta tema.

EL CASO DE LA HERMANA DIANA

Cuando la hermana María Diana, de 84 años, de Springfield, Oregon, se convirtió en ermitaña, fue una de las primeras en los EE.UU y ahora vive con la hermana María Magdalena, de 90, quien también fue una de primeras ermitañas del país.

Dice la hermana que una de las razones para el aumento de la vida eremítica es el hecho de que cuando el Canon 603 fue promulgado en 1984, permitió que los obispos aceptaran dentro de sus propias diócesis ermitaños que no estaban afiliados a las órdenes religiosas.

La razón de su opción para vivir junto con la otra eremitaña es que las órdenes religiosas de mujeres católicas no la aceptaban a causa de su edad, y convertirse en una ermitaña, le daría la oportunidad de participar en la vida religiosa.

María, que vive en la costa del Golfo, cree que el aumento de los ermitaños también puede ser un signo de los tiempos.

“La llamada fue contestada en la Iglesia primitiva, cuando había herejía y persecución”, dijo. “El mundo había llegado a ser tan malo, la gente no podía vivir más en él”.

“Tal vez el Espíritu Santo renueva la vida eremítica para traer de vuelta las órdenes que necesitamos.”

La Hermana María Diana piensa que algunos pueden estar yendo a la vida eremítica, debido a la decadencia moral de la cultura.

No considera la vida eremítica como solitaria. Ellas asisten a una parroquia católica bizantina, tienen horario estructurado, y oran todo el tiempo tratando de estar lo más cerca posible del Señor.

Además tienen una tarea de evangelización, porque es común que haya gente que se les acerque, especialmente gente que está pasando por momentos difíciles y comienza una práctica de orar con ellos.

Y en consecuencia de ello ceden muchas veces su cabaña para retiros, pero esto lo hacen sin ningún tipo de publicidad, sino que la gente las encuentra. Y ellas no cobran nada, sino que reciben una limosna.

EL CASO DEL HERMANO MARTIN

El Hermano Martin, de los Ermitaños de la Bienaventurada Virgen María del Monte Carmelo en Christoval, Texas tiene hermanos ermitaños alrededor que han llegado a ser como una familia para él.

Considera que su vida es una imitación a la de Cristo,

“En la vida eremítica uno se retira del mundo, al igual que Cristo hizo cuando se fue por 40 días al desierto para orar o cuando fue a lugares solitarios para orar”.

Y cuenta que ha tenido experiencias buenas especialmente con protestantes que lo han ido a ver,

“Lo creas o no, los protestantes parecen identificarse más con lo que es la oración intercesora. Tenemos un montón de visitantes protestantes. Lo ven como un elemento de la Iglesia orante. Cuando la gente viene son evangelizados por el lugar”.

Parte de su vida de evangelización es atender a los invitados a la ermita.

La organización que se han dado estos eremitas es vivir en viviendas independientes y orar algunas de sus oraciones en privado, a diferencia de los monasterios.

Y en conjunto, estos hermanos ermitaños hacen diferentes tipos de pan, así como jaleas, mantequilla de manzana y dulce de leche con chocolate. Y la gente también dona y ayuda con la construcción de la ermita. La gente compra productos de los ermitaños desde su página web, a través del catálogo de lo que los monjes ermitaños producen, o en la tienda de regalos de la ermita.

Estos ermitaños tienen un horario estricto, y físicamente exigente. Se levantan a las 3:30 am todos los días, y cuando no están utilizando el tiempo para orar, están cuidando de la gran ermita, la jardinería, el cuidado de las cabras y gallinas, cuidando los jardines, y en la excavación de zanjas. Se acuestan a dormir a las 8:30 pm.

Lo interesante es que no encuentran inconveniente en el horario, sino que les trae mucha paz a los que lo practican.

EL CASO DE MAXIME QAVTARADZE

Está siguiendo las antiguas tradiciones de los Estilitas, o Santos de las rocas: hombres del mundo bizantino que creen que residiendo arriba de rocas elevadas eliminarán la tentación y tendrán una amplia oportunidad para la oración y la contemplación.

Este monje de Georgia ha estado en una roca a 40 metros de altura desde hace más 20 años en una búsqueda solitaria de acercarse a Dios.

Qavtaradze se trasladó en 1993 después de haber tomado sus votos monásticos, y encontró que se acercó más a Dios y le ayudó a desterrar un pasado turbulento.

“Es aquí, en el silencio que se puede sentir la presencia de Dios”, dijo. ”Cuando yo era joven bebía, vendía droga, todo. Cuando terminé en la cárcel sabía que era hora de un cambio”.

A Qavtaradze le lleva 20 minutos bajar de la peligrosa roca por una escalera adosada a la columna dos veces por semana para rezar en un pequeño monasterio al pie de la torre. El confía en provisiones diarias llevadas por cristianos que le apoyan.

LA TECNOLOGÍA

El hermano Martin y los otros ermitaños – no tan aislados como Qavtaradze -, como la hermana María Diana no tienen acceso a la radio, la televisión o periódicos. Pero como venden sus productos artesanales en línea, deben tener acceso a la Internet para mantener la página web y seguir el ritmo de las ventas. A un hermano ermitaño no se le permite acceder a Internet por sí mismo, sino que debe hacerlo con su superior presente o en unión con todos los demás.

Esta es una forma de controlarse y no caer en tentación.

Pero no están totalmente aislados del mundo, porque los hermanos superiores se mantienen se informan y comentan a los otros ermitaños las situaciones meteorológicas y los principales eventos noticiosos. Por ejemplo, comenta Martin que los atentados del 11/9 le fueron mostrados por el Superior con imágenes de lo que ocurrió en el computador.

RECONOCIENDO LA LLAMADA

Las vocaciones a la vida eremítica puede venir de varios lados distintos.

Antes de convertirse en un ermitaña, la hermana María Diana fue una monja enclaustrada por 20 años, sin embargo, ella dice que experimentó una “llamada dentro de la llamada”; percibió que estaba siendo llamada a la vida ermitaña.

El Hermano Martin María, que ha sido ermitaño durante 13 años, dijo:

Sentí como que [la llamada] estaba muy dentro de mí, en busca de una vida de oración… creyendo que se trataba de una forma de vida. La oración era algo que era muy útil para mí. Yo estaba creciendo a través de la oración. Me di cuenta de que era el camino que tengo que seguir por el resto de mi vida“.

El hermano Martin se había apartado de la fe cuando fue a la universidad, a pesar que fue criado como católico e iba a misa los domingos.

Cuando tomó la decisión de convertirse en ermitaño tuvo resistencia de su familia por ser hijo único, al ser célibe anulaba la posibilidad de nietos, además del abandono de la carrera universitaria.

En el caso de la Hermana María Diana ella empezó a decir el oficio divino en 1996, y empezó a tener hambre de una orden religiosa. Pero no pudo acceder a ninguna orden por su edad.

Y una vez leyendo sobre vocaciones para mujeres mayores, en las órdenes religiosas se encontró con un mensaje de alguien se identificó como “semi-eremítica.” No sabía lo que eso significaba, por lo que se puso en contacto con el autor del post, que resultó ser un superior de monjes ermitaños.

Para ella fue una revelación de que existía una vida así y a partir de ahí, comenzó una búsqueda leyendo todo lo que pudo sobre ermitaños.

Fuentes:


Foros de la Virgen María

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