Después
de conocer en su día el apasionante mundo de los “agrapha” (pinche aquí si le interesa el tema) y de
conocer después algunos de ellos entre los más interesantes (pinche aquí sobre el tema), nos detenemos
hoy en uno particularmente valioso, éste que recoge el llamado “Códice D” de Lucas que siempre me llamó poderosamente la atención, por lo que
tiene de pedagógico y edificante:
“El mismo día, viendo a uno trabajando en sábado, le dijo: ‘Hombre, si sabes lo que haces, bendito eres, pero si no lo sabes, eres maldito y un transgresor de la Ley’” (op. cit. 6, 4).
Agrapha en el que una vez más vemos a Jesús arremeter contra el sábado, uno de los argumentos principales de su ministerio como tuvimos ocasión de ver en su día (pinche aquí sobre el tema), pero que le sirve para introducir en el debate nuevas derivadas.
En este agrapha Jesús pondera al judío que, conociendo las obligaciones que impone el sábado, no las cumple, por suponer que el que así lo hace ha realizado un ejercicio profundo de reflexión y adoptado una decisión deliberada y premeditada de incumplir con un precepto que tras dicho ejercicio de reflexión, considera absurdo o injusto.
Pero condena también a quien actuando como él mismo, Jesús, preconiza que se debe hacer, es decir, incumpliendo las absurdas prescripciones que impone el sábado, lo hace simplemente por no conocerlas, porque ello, lejos de implicar una decisión reflexionada y elegida, implica desidia y desinterés en la formación de la propia opinión, y una falta de coherencia y de determinación en la toma de la decisión que implica, sí, coincidencia con lo que se preconiza, pero no por ello, fidelidad alguna a la doctrina o adhesión a quien la predica.
Jesús, en definitiva, condena con mayor dureza a quien no trabaja para formar su opinión de forma sólida y consistente, que a quien de manera irreflexiva o inopinada incluso cumple, de manera casual, con lo que se predica. Jesús no pide cumplimiento irreflexivo: pide adhesión consciente, reflexiva, sopesada y meditada. Bonita lección ¿no les parece?
Y sin más por hoy, me despido de Vds., no sin dejarles hoy un aviso. El Grupo Ecos al que pertenezco interpreta durante esta cuaresma una obra titulada “Un Auto Sacramental del siglo 21”, escrita por un tal Luis Antequera, no sé si les sonará a Vds.. Las representaciones esta semana son dos:
- Jueves, 26 de febrero: iglesia de San Bonifacio, C/Bremen, 2. Parque de las Avenidas. Madrid. Hora: 20:00 hs..
- Viernes, 27 de febrero: iglesia de Santa Teresa y Santa Isabel. Plaza Pintor Sorolla, 2. Madrid. Hora: 20:45 hs.. (En el marco del Festival de Arte Sacro de Madrid)
La entrada es libre y gratuita, diría que “hasta completar aforo”, ojalá que lo consigamos. Tenemos quinientas plazas que ocupar cada día.
Será un placer verles por ahí. Y ahora sí me despido, deseándoles, como siempre, que hagan Vds. mucho bien y no reciban menos.
“El mismo día, viendo a uno trabajando en sábado, le dijo: ‘Hombre, si sabes lo que haces, bendito eres, pero si no lo sabes, eres maldito y un transgresor de la Ley’” (op. cit. 6, 4).
Agrapha en el que una vez más vemos a Jesús arremeter contra el sábado, uno de los argumentos principales de su ministerio como tuvimos ocasión de ver en su día (pinche aquí sobre el tema), pero que le sirve para introducir en el debate nuevas derivadas.
En este agrapha Jesús pondera al judío que, conociendo las obligaciones que impone el sábado, no las cumple, por suponer que el que así lo hace ha realizado un ejercicio profundo de reflexión y adoptado una decisión deliberada y premeditada de incumplir con un precepto que tras dicho ejercicio de reflexión, considera absurdo o injusto.
Pero condena también a quien actuando como él mismo, Jesús, preconiza que se debe hacer, es decir, incumpliendo las absurdas prescripciones que impone el sábado, lo hace simplemente por no conocerlas, porque ello, lejos de implicar una decisión reflexionada y elegida, implica desidia y desinterés en la formación de la propia opinión, y una falta de coherencia y de determinación en la toma de la decisión que implica, sí, coincidencia con lo que se preconiza, pero no por ello, fidelidad alguna a la doctrina o adhesión a quien la predica.
Jesús, en definitiva, condena con mayor dureza a quien no trabaja para formar su opinión de forma sólida y consistente, que a quien de manera irreflexiva o inopinada incluso cumple, de manera casual, con lo que se predica. Jesús no pide cumplimiento irreflexivo: pide adhesión consciente, reflexiva, sopesada y meditada. Bonita lección ¿no les parece?
Y sin más por hoy, me despido de Vds., no sin dejarles hoy un aviso. El Grupo Ecos al que pertenezco interpreta durante esta cuaresma una obra titulada “Un Auto Sacramental del siglo 21”, escrita por un tal Luis Antequera, no sé si les sonará a Vds.. Las representaciones esta semana son dos:
- Jueves, 26 de febrero: iglesia de San Bonifacio, C/Bremen, 2. Parque de las Avenidas. Madrid. Hora: 20:00 hs..
- Viernes, 27 de febrero: iglesia de Santa Teresa y Santa Isabel. Plaza Pintor Sorolla, 2. Madrid. Hora: 20:45 hs.. (En el marco del Festival de Arte Sacro de Madrid)
La entrada es libre y gratuita, diría que “hasta completar aforo”, ojalá que lo consigamos. Tenemos quinientas plazas que ocupar cada día.
Será un placer verles por ahí. Y ahora sí me despido, deseándoles, como siempre, que hagan Vds. mucho bien y no reciban menos.
Luis
Antequera
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