CUANDO ASISTIMOS A LA MISA TRADICIONAL, ENTRAMOS EN CONTACTO CON EL CIELO, JUNTO A LA SANTÍSIMA TRINIDAD, MARÍA, LOS SANTOS, ÁNGELES Y BENDITAS ALMAS DEL PURGATORIO, NOS SENTAMOS A LA MESA DEL ALIMENTO BAJADO DEL CIELO Y MULTITUD DE PECADOS NOS SON PERDONADOS.
Reveladas por Nuestro Señor Jesucristo a Santa Gertrudis la Grande.
1. La Misa es la continuación del Calvario.
2. Cada Misa es el Sacrificio de Nuestro Señor durante su vida, Pasión y muerte.
3. La Santa Misa es el más poderoso atenuante de tus pecados.
4. A la hora de la muerte las Misas que has oído serán tu gran consolación.
5. Cada Misa irá contigo al día de tu Juicio particular y rogará el perdón para ti.
6. En Misa puedes disminuir en mucho o en poco la pena temporal debida a tus pecados, acorde al fervor con que la oigas.
7. Asistiendo devotamente a la Santa Misa tu rindes a la Sagrada Humanidad de Nuestro Señor el más grande homenaje.
8. Suple muchas de tus negligencias y omisiones.
9. El olvida tus pecados veniales que no has confesado, el poder de Satanás sobre ti es disminuido.
10. Le otorgas a las almas del Purgatorio el más grande alivio posible.
11. Una Misa escuchada en vida vale más que muchas que celebren por ti luego de tu muerte.
12. Eres preservado de peligros e infortunios que de otra manera caerían sobre ti. Tú acortas tu Purgatorio.
13. Cada Misa gana para ti un grado más alto de gloria en el Cielo.
14. Recibes la bendición del sacerdote la cual Nuestro Señor ratifica en el Cielo.
15. Te arrodillas en medio de una multitud de ángeles, que están presentes en el adorable sacrificio con extrema reverencia.
16. Eres bendecido en tus trabajos temporales y otros asuntos.
16. En la eternidad, realizamos totalmente lo que hemos asistido en santa misa diariamente.
17. Los sacerdotes son más fuertes a la consagración en la Santa Misa, mientras están elevando la Hostia y el Cáliz.
18. Cada vez que miramos el Santísimo Sacramento nuestro lugar en el Cielo es elevado para siempre —
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