¡Cristo ha resucitado! Aleluya, aleluya. Por más problemas que nos
acucien, aunque los lobos nos rodeen, aunque el agua nos llegue al cuello, pase
lo que pase, aunque se derriben los pilares de la tierra, aunque las estrellas
caígan desde lo alto del cielo, Jesús ha resucitado y nosotros resucitaremos
con Él. El Bien ya ha triunfado. La victoria es de Dios. El Altísimo es el
Invencible. La Resurreción es la prueba definitiva.
Los fariseos y escribas se dijeron: a otros ha hecho levantarse de la
muerte, ¿pero quién lo resucitará si lo matamos a Él mismo? Pero Cristo se
resucitó a sí mismo.
Las cosas pueden ponerse muy mal, pero conocemos el final de la
Historia. Todo acaba en una abrumadora e arrolladora victoria divina. Enjugad
todas las lágrimas, la hora se acerca incontenible.
¡¡Aleluya, ALELUYA, aleluya, ALELUYA, aleluya!!
Publicado por Padre Fortea
No hay comentarios:
Publicar un comentario