Es más sano ser religioso, o incluso indiferente.
Un estudio demuestra que las personas espirituales pero no ligadas a la regularidad y disciplina de una religión sufren más neurosis, adicciones, desórdenes de alimentación y fobias.
Ya lo decía aquel anuncio de neumáticos: "la potencia sin control no sirve de nada". Más aún, es peligrosa: sin una buena adherencia, uno resbala, derrapa y se accidenta.
Pues según parece indicar un reciente estudio en el British Journal of Psychiatry, lo mismo pasa en la espiritualidad. Las personas "espirituales" pero que no gozan de la "buena adherencia" de una religión estable tienen más riesgos de desórdenes psicológicos.
Por ejemplo:
- los que son "sólo espirituales" que han consumido drogas, doblan a los "religiosos" que lo han hecho
- los "espirituales" adictos a las drogas doblan a los "religiosos" dependientes
- los "espirituales" tienen un riesgo un 25% mayor que los "religiosos" de desarrollar un trastorno de ansiedad
- los "espirituales" tienen hasta un 70% más posibilidades de tener fobias que los "religiosos"
El estudio se realizó a partir de 7.000 entrevistas en Gran Bretaña: un 35% declaraban tener "una visión religiosa de la vida"; un 19% se autoconsideraba "espiritual pero no religioso" y un 46% se declaraba "ni espiritual ni religioso".
LOS INDIFERENTES, MÁS RIESGO DE ADICCIONES
El estudio encontró que "las personas religiosas tienen una prevalencia de desórdenes mentales similar a las que no son ni religiosas ni espirituales", aunque con dos diferencias en contra de los no-religiosos: éstos tienen un mayor porcentaje de personas con problemas de alcohol y de personas que han probado drogas alguna vez.
Por su parte, los "espirituales pero no religiosos" tienen más riesgo que el resto de la población de dependencia de drogas, están más frecuentemente bajo medicación psicotrópica, tienen más riesgo de desórdenes de alimentación (anorexia y bulimia), de fobias y de desórdenes neuróticos.
E-MAILS GROSEROS CONTRA EL CIENTÍFICO
Michael King, profesor en el University College de Londres (Unidad de Ciencias de la Salud Mental) e investigador principal del proyecto dice que después de publicar el estudio recibió "una cantidad sustancial" de e-mails agresivos e insultantes contra él.
Pero se mantiene firme en sus resultados: “Si consideras la dependencia a las drogas, son aproximadamente 77% más propensos que los encuestados religiosos, y 24% más propensos a tener un trastorno de ansiedad generalizado. Estas son diferencias muy obvias”.
DIFERENCIAS ENTRE EEUU Y EUROPA
Pero, ¿qué significa ser "espiritual pero no religioso"? Probablemente en Europa y en Estados Unidos significa dos cosas distintas. En Estados Unidos las iglesias protestantes y evangélicas hace decenios que predican que "la religión no salva, sólo salva Jesús; la religión esclaviza; Jesús libera", así que hay millones de cristianos que van cada semana a su iglesia protestante pero que en una encuesta dirían que ellos no son religiosos, sino "espirituales", aunque es evidente que cumplen todos los requisitos sociológicos. Por eso, ese 33% que declararon a Gallup en 2002 ser "espirituales no religiosos" en realidad pertenecen -en alto porcentaje- a iglesias evangélicas, pentecostales o de otros tipos.
En cambio, en Gran Bretaña -donde se hizo el estudio que comentamos- los "espirituales no religiosos" incluyen a los agnósticos con inquietudes filosóficas, los poetas en general, los vagamente deístas o panteístas, y muchos cristianos no practicantes o meramente indisciplinados. Y, por supuesto, a la miríada de practicantes de variantes de "Nueva Era" (reiki, orientalismo, flores de Bach, yogas, relajaciones, método silva, etc...)
Incluso existe una web para estos "spiritual but not religious": Sbnr.org . Su lema es: "El amor es la respuesta, tú eres la pregunta". Pero si el lema fuera al revés ("El amor es la pregunta, tú eres la respuesta") o al revés del revés ("El amor eres tú; la pregunta es la respuesta") daría exactamente lo mismo: si no hay ortodoxia ni doctrina ni amor a la verdad y la razón, tanto vale una cosa como otra.
¿QUÉ ES LA CAUSA Y QUÉ EL EFECTO?
En cualquier caso, el estudio demuestra una correlación, no necesariamente una causalidad. ¿Los "espirituales" tienen más desórdenes mentales por no ser religiosamente estables y disciplinados? ¿O dejaron de ser religiosos -quizá rechazados por la comunidad "ortodoxa"- porque tenían desórdenes mentales? ¿Eran "demasiado espirituales" para el conformismo de los ortodoxos, que no podían ofrecerles un espacio?
La psicóloga Tanya Luhrmann, antropóloga y profesora en la Universidad Stanford (EEUU) explicó a la CNN que al menos en Occidente la religiosidad estable y disciplinada (como ir a la iglesia cada semana o casi cada semana) tiene efectos benéficos que se pueden medir sociológicamente:
- hay una red de apoyo social
- hay una creencia firme y eficaz en un Dios amoroso
- hay práctica organizada de la oración
Las tres cosas ayudan al bienestar psicológico.
“Cuando eres espiritual pero no religioso, pierdes los primeros dos puntos y la mayoría de las personas espirituales-no-religiosas no practican el tercero”, dijo Luhrmann. “Lo que funciona no es sólo una creencia genérica en Dios; son las prácticas específicas lo que funciona”.
PROTÉJASE: RECE REGULARMENTE CON AMIGOS
Otro enfoque en esta línea es el de Robert Putnam, especialista en estudios sobre felicidad y bienestar. Como ya explicamos en ReL, Putnam y el sociólogo Chaeyoon Lim publicaron en la American Sociological Review que la religiosidad da beneficios claros en forma de felicidad, mayor salud mental, apoyos económicos, estabilidad y protección contra adicciones cuando se cumplen TODAS estas condiciones:
- reunirse regular y frecuentemente (por ejemplo, cada semana)
- para compartir algo espiritual (rezar o cantar himnos con fe; no para actividades solidarias u organizativas)
- con amigos, gente a la que se conoce por su nombre y se aprecia
Las personas "espirituales pero no religiosas" casi siempre carecen de la regularidad y a menudo de los amigos necesarios para lograr los beneficios sociológicos de la religión.
¿Y JESÚS QUE DICE DE ESTO?
Por último, desde el punto de vista del cristianismo, el padre Jordi Rivero de Corazones.org, cuando le hablan de por qué no es bueno limitarse a ser "espiritual" sin religión, se remite a las enseñanzas del mismísimo Jesucristo que tenía su propia opinión sobre esos "espirituales", incluso de los que hacían milagros:
«No todo el que me diga: "Señor, Señor, entrará en el Reino de los Cielos, sino el que haga la voluntad de mi Padre celestial. Muchos me dirán aquel Día: "Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre expulsamos demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros?" Y entonces les declararé: "¡Jamás os conocí; apartaos de mí, agentes de iniquidad!" (Mateo 7,21-23)
P. J. Ginés/ReL
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