Benigno Blanco, su presidente.
El presidente del Foro Español de la Familia, Benigno Blanco, pidió explicaciones al Gobierno por su "cambio de postura" sobre el "matrimonio" homosexual, después de que el ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón, anunciara este martes que el Gobierno acata la sentencia del Tribunal Constitucional (TC) que avala el matrimonio entre personas del mismo sexo y que mantendrá "exactamente" la reforma que ha validado el Alto Tribunal.
"Como mínimo, debe dar una explicación seria y solvente de sus argumentos para este cambio de postura que no se entiende. Y el cambio de postura no puede estar justificado sin más porque sea constitucional esta ley, porque era también constitucional la anterior", ha insistido.
En este sentido, ha apuntado que "no es de recibo intelectual" que digan "que por haberse dictado esta sentencia se acabó el debate" pues, a su juicio, que una ley sea constitucional "no implica que sea la conveniente, justa y razonable".
Así, ha pedido al Gobierno que, despejada esta duda sobre la constitucionalidad de la ley, proceda a su derogación y al restablecimiento de la regulación del matrimonio como institución singular y específica para la unión entre el hombre y la mujer, regulando aparte otro tipo de uniones.
INICIATIVA LEGISLATIVA POPULAR PARA 2013
Además, ha apuntado que, en caso de que el PP no derogue esta ley, el Foro de la Familia llevará al Parlamento una reforma legislativa y presentará una iniciativa legislativa popular que irá en la misma línea que la que presentó en 2005 sobre esta materia y que deberá ser avalada con al menos medio millón de firmas de ciudadanos españoles.
La iniciativa, según ha explicado, la presentarán en 2013 y busca restablecer el matrimonio "como institución de singular relevancia para la unión entre hombre y mujer, sin perjuicio de que haya otras regulaciones para otro tipo de uniones entre distintas personas" y dar prioridad al interés de los niños al "reservar legalmente la adopción por un padre y una madre".
REGULACIÓN DE LAS UNIONES HOMOSEXUALES
Preguntado por su sentimiento al ver la celebración de hombres y mujeres homosexuales ayer en la Puerta del Sol tras conocer el fallo del TC, Blanco ha subrayado que "no se deben hacer leyes con sentimientos, entre otras cosas, porque el Derecho no se ocupa de los sentimientos de la gente" pues "si el Derecho se hiciese para regular sentimientos, esto sería un estado totalitario".
No obstante, ha señalado que entiende que haya "gente que se pueda querer mucho fuera del matrimonio" y "personas que pueden tener una gran atracción hacia personas del mismo sexo y disfrutar profundamente de esa relación" pero ha apuntado que el Derecho debe dar a aquella unión con más relevancia social "un tratamiento jurídico social protector, que no excluye a nadie ni discrimina a nadie".
"Lo que no me parece justo ni razonable es mezclar todas estas opciones en una institución que no se sabe ya muy bien lo que es, es lo que le sucede al matrimonio en la ley española actual", ha añadido, al tiempo que ha indicado que, con la ley del matrimonio homosexual y la del divorcio exprés, el matrimonio se ha convertido en "la institución jurídicamente menos protegida de todas las que regulan las leyes españolas".
Según ha apuntado, es como si se regulase el deporte del fútbol y un jugador dijese que se siente discriminado por no poder tocar el balón con la mano.
"Mi respuesta a ese problema es ´juegue usted al baloncesto, no pasa nada, no se limita el derecho de nadie, pero si quiere jugar al fútbol, el balón se toca con los pies´.
Para poner otro ejemplo, ha recordado que en la época comunista "se pretendió que Naciones Unidas reconociese como democracia también a las dictaduras para que nadie se sintiera discriminado".
"Si llamamos democracia a todos los regímenes del planeta, para que nadie se sienta discriminado será muy igualitario pero ya no sabemos de qué estamos hablando cuando decimos la palabra democracia. Es bueno llamar a cada cosa con su nombre, no discrimina a nadie sino que permite elegir", ha precisado.
Europa Press
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