ROMPIENDO LAS HERENCIAS DE MALDICIÓN

Todo lo que halla pasado y que no cortemos espiritualmente va a seguir pasando. Génesis 50 versículo 20.

La Biblia dice que la herencia llega hasta la cuarta generación, y uno hereda no sólo las cosas buenas, si no también las cosas malas.

Lo que la Biblia llama herencia, se ha descubierto científicamente, se llama “sociogenograma”, se ha descubierto que nosotros heredamos a nivel emocional un montón de cosas de nuestros antepasados, y nos identificamos con las cosas malas que le han pasado a ellos, y por sentirnos en deuda, reproducimos lo mismo que les sucedió a ellos.

¿Qué son esas deudas?
Hay dos tipos de deudas: las deudas eternas. ¿Cuál fue el sacrificio mas grande que hizo un familiar por ti? Si esa deuda no se cancela, siempre vas a estar en deuda con ese familiar. Si yo invito a alguien a cenar, esa persona queda en deuda porque yo le di algo.

Cuando alguien en nuestra familia nos da algo basado en mucho sacrificio y no nos dejan saldarlo, nos pasan siempre la factura. Vamos a suponer que a la persona que invité a cenar, me devuelve la cena, pero no acepto esa cena, él va a quedar en deuda permanente. ¿Por qué hay muchos varones que no pueden formar pareja? Porque la mamá le dice: yo me sacrifique por ti, y tú me vas a pagar la deuda viviendo conmigo todos los días hasta que me muera. No se lo dice así, pero inconscientemente hay personas que quedan atadas a los padres porque dentro suyo dicen: tengo que estar acá para saldar la deuda que tengo con ellos.

A veces las deudas nos vienen por la culpa que se nos generó. Piensa las cosas buenas que te pasaron y que no les pasó a tus familiares, eso genera deuda, culpa, porque uno dice: ¿por qué a mi me fue bien, pero mi hermano se murió?

Entonces cuando uno crece en una casa donde alguien le pasó algo malo que a uno no le pasó, se llama la culpa del sobreviviente, la culpa del bendecido. Cuando te pasa algo bueno que no le pasó ni a tu mamá, ni a tu papá, ni a hermanos, viene la culpa.

Entonces qué son esas deudas emocionales: esas deudas se van a buscar pagar, las vamos a pagar sufriendo, reproduciendo las cosas malas que les pasaron a nuestros familiares. Cuando a nosotros nos pasan cosas buenas que no les pasaron, o cuando les pasan cosas malas que a nosotros no, o cuando ellos se sacrificaron por nosotros y nunca pudimos saldar la deuda, siempre nos pasamos facturas, vamos a reproducir cosas malas.

Esto la Biblia lo llama la “herencia espiritual”, y la ciencia lo llama “sociogenograma”, es como se va reproduciendo, por ejemplo se pueden reproducir para saldar esas deudas, experiencias traumáticas que vivieron nuestros antepasados.

Por ejemplo una mujer que tenía un hermano; se murió su hermano, esa mujer tuvo dos hijos, uno de ellos se murió, el otro no, el hijo que quedó tuvo dos hijos, y uno de ellos se murió y el otro no... y empiezas a ver como siempre está la muerte de un hermano en esa familia. Es como si en lo profundo de la mente uno dijese yo tengo que pagar una deuda, tengo que morir como murieron, entonces uno reproduce las desgracias.

Un señor que estaba en una avioneta, un experto piloto, un día queda paralítico, le preguntan: ¿cómo fue?. De la manera mas entupida. Yo soy un paracaidista profesional, pero ese día yo fui sin mi equipo sin mi gente conocida, y volé con una persona desconocida y no me puse bien el paracaídas; cuando estábamos levantando vuelo la persona me dice ¿estás listo? Si... y me empujó, y yo caí mal, y quedé paralítico. Cuando empieza a contar la historia la persona profesional que lo atiende le dice: ¿hay alguien mas paralítica en su familia? No, no hay más nadie; y de pronto dice: ah si mi papá, no lo registraba. Y el papá ¿cómo quedo paralítico?; cuenta que una vez fue a trabajar a la empresa, que era una empresa de ácidos, pero no fue con su equipo, fue con gente desconocida, entonces uno abrió la canilla con ácido, le calló en las piernas y quedó paralítico. Fíjense como este muchacho reprodujo el mismo mal de lo que le había pasado a su papá, porque cuando hay una deuda la tienes que pagar, pero en este día vamos a cancelar todo lo malo que le halla pasado a nuestro abuelo, padres, porque dice la Biblia que nuestra descendencia será bendita por mil generaciones.

Otro ejemplo. Una mujer que tiene cardiopatía congénita se casa, y se ponen de acuerdo de no tener hijos para que no tengan la cardiopatía congénita; se casan, son felices... un día dicen vamos a adoptar a una persona, un bebe. Viajan a la india, adoptan un bebe cuando llegan a los EE.UU. pasan unos meses, años, y el bebe ¿qué enfermedad tiene? Cardiopatía congénita. Cuando lo llevan a operar, mientras lo operan, la mujer se da cuenta que al bebe lo operaron en el mismo hospital, a la misma hora y el mismo día, el mismo médico que la operó a ella... eso no es casualidad, eso es como las cosas se van pasando de generación en generación.

Podemos reproducir accidentes. Hay personas que tienen accidentes automovilísticos que reproducen el mismo accidente que tuvo el papá o el abuelo, porque la manera de pagar las deudas emocionales es reproduciendo algo malo.

Una familia que la abuela se muere a los 45; la hija tiene hijos, se muere a los 45; la nieta se muere a los 45; la misma fecha o la misma edad. A un muchacho, lo llevan al médico porque un día en el año en particular siempre se accidentaba, sólo en ese día; cuando empiezan a investigar el medico descubre que ese día era el día en el que el abuelo se había suicidado; fíjense como en lo profundo de la mente el muchacho dice: mi abuelo se suicidó, yo tengo que saldar esa deuda, yo voy a reproducir. Inconscientemente, voy a seguir reproduciendo eso malo que paso.

Y ni hablar de padres que se le muere un hijo; inmediatamente las parejas tienen otro hijo, y le ponen el nombre del bebe muerto, y reemplazan el lugar de una persona muerta.

Tenemos varios ejemplos en la Biblia: Abraham, Isaac y Jacob. Abraham tuvo un hijo que se llamó Isaac, Isaac tuvo un hijo que se llamó Jacob, y Jacob tuvo un hijo que se llamó José. Abraham se casó con una mujer estéril, porque tenía miedo de ser padre; Isaac se casó con una mujer estéril, y Jacob se casó con una mujer estéril, pero José no se casó con una mujer estéril, José cortó la maldición generacional. Que la unción de José venga a nosotros y todo lo malo que ha pasado a tras se corte, y todo lo bueno comience después de nosotros.

Abraham, Isaac y Jacob, tuvieron la misma profesión, pero José no. Abraham, Isaac y Jacob se casaron con mujeres de la misma parentela, José no. Abraham pasó hambre, Isaac pasó hambre, Jacob pasó hambre, pero José, no.

Abraham miente: un día estaba con la mujer, que era muy bonita, entonces llegan a un lugar, y como le agarró miedo, miente y dice que era su hermana; Isaac hizo lo mismo, Jacob vivió mintiendo, pero José cortó con esa maldición.

Abraham era bastante rico, Isaac también, Jacob también, pero José era dueño de todo.

José cortó todas esas maldiciones. Dios le dijo a Abraham te bendeciré y te multiplicaré de tal manera... a Isaac le dijo lo mismo, a Jacob le dijo lo mismo, pero a José no le dijo lo mismo, le dijo más todavía.

Todo lo que halla pasado y que no cortemos espiritualmente va a seguir pasando, el esclavo tiene hijos esclavos, y ese hijo tiene mas esclavos, hasta que hay alguien que se levanta y entiende el poder de Dios sobre su vida y dice eso pasó para atrás, pero de acá en adelante yo y mi casa estableceremos una gran bendición por la próxima generación.

1. Si me lleno del sueño de Dios, seré libre: ¿que hizo José? Se llenó del sueño de Dios. A José lo tiraron al pozo, pero el pozo no entro dentro de él; lo tiraron a la carel, pero la cárcel no entró dentro de él; lo metieron de sirviente, pero sirviente no entró dentro de él porque no entró en él. Porque él estaba lleno de los sueños de Dios. Si te llenas del sueño de Dios, no habrá lugar para que nada malo entre. José tiene 17 años y tiene un sueño, sueña con trigos, con manojos, un manojo se queda derecho y los demás se doblan, huy dice, voy a gobernar. Va y se lo cuenta a los hermanos y los hermano se enojan, ¿qué hace José?, se va a dormir otra vez, y sueña con estrellas. Ya no gobierna una ciudad, gobierna el mundo, porque José se fue y soñó algo mas grande que el primer sueño. Cuando huelas enojo, cuando huelas ataque, tienes que prepararte para soñar cosas mas grandes. Porque lo que te va a acompañar en el recorrido es el sueño de Dios.

2. Todo estará sometido a mis pies: ¡todo!, ¿qué sabía José? Todo, porque lo soñó. Los manojos se inclinaban, todo se va a inclinar delante tuyo, pero cuando los hermanos lo tiraron al pozo, José se inclinó delante de ellos, después lo agarraron unos compradores y José se inclinó delante, después lo metieron de sirviente en la casa de Potifar, y se inclinó, después en la cárcel y se dobló delante del carcelero. El Faraón lo manda a llamar y le interpreta el sueño, y dice: “Egipto, acá esta José”. Todo el mundo se va a inclinar delante de él, y la esposa de Potifar se inclinó delante de él, los hermanos, los carceleros, todos terminaron inclinados, porque Dios te va a dar dominio sobre todos los que te sometieron, te inclinaste delante de la deuda, delante de los problemas delante de la enfermedad, ahora todo eso se va inclinar hacia ti.

Es por un tiempo, cuando me tiren al pozo, cuando me vendan, cuando esté en la cárcel es por un tiempo, a la larga todos se van a inclinar.

La deuda me sacó la cabeza... recupérala porque la vas a necesitar para las finanzas que Dios te va a mandar, porque es por un tiempo.

José sabia que sus antepasados mintieron, pasaron hambre, pero dijo: yo no, yo he soñado algo de Dios, yo he soñado que iba a bendecir a la gente de la tierra, y me he llenado del sueño de Dios.

3. José tenia un sueño, que iba a bendecir a su casa, hoy vamos a bendecir a nuestra casa. Hay gente que bendice a los amigos, a su jefe, pero no bendice a la esposa o al esposo.

Hay gente que con los demás son buenos, Pablo dice: si alguno no provee para su casa, es peor que un incrédulo, porque la bendición empieza por casa. José no dijo voy a bendecir a todos y mis hermanos que se pudran; dijo, yo voy a bendecir a mi casa, y aunque me hallan tirado, yo tengo un sueño para bendecirlos. Vamos a bendecir a tus viejos, a tus hermanos, a la loca de tu cuñada, hasta tu suegra.

Diez mil personas escuchando a Jesús que habló como tres días, dicen que vino Felipe y le dijo: maestro despídelos, no tenemos para darles de comer. Jesús dijo: ¿que tienen?. Viene Andrés... acá hay un chico que nos dio 5 panes. Pregunta: ¿en diez mil personas solo un niño tenia 5 sándwiches? Hubo un niño que se animó a salir de la multitud y dijo: no me importa si no da nadie, a mi me enseñaron a dar, porque cuando uno da, siempre termina bendiciendo a su casa... el único que le dio los 5 sandwichitos fue el niño. Eran diez mil miserables, pero cuando le dio de comer a todos, dice que sobraron 12 cestas, llenas de pan, y Jesús le dijo: désenla al niño... y lo seguían con las doce cestas, toda la ciudad va a ver con sus ojos como te sigue la prosperidad de Dios sobre tu vida. Vas a bendecir a tu mamá, a tu papá, a tus hijos, no vas a llegar con 5 panes, si no con 12 cestas llenas. Esa es nuestra herencia, abundancia. Saliste con doce panes mas Dios te devuelve con 12 cestas llenas. Sal de la multitud y marca la diferencia.

4. Todo será sobrenatural, ustedes dicen que faltan 4 meses para la cosecha, alcen sus ojos y miren, la cosecha ya está lista, Dios te va a dar 4 meses antes lo que estabas esperando. La palabra de fe, la palabra profética es rápida, porque siempre va adelante tuyo, para que corras atrás de la palabra; siempre la promesa esta delante, cuando José soñó, voy a gobernar a Egipto, a bendecir a mi casa, la palabra estaba adelante.

Esta Elías en la montaña y ora... sequía total y le dice al criado fíjate si ves alguna nube, criado anda y fíjate, no hay nada, vuelve a orar, anda a ver devuelta, no hay nada, así siete veces. El siervo que significa, la fe, la séptima vez vio una nube como la palma de la mano, chiquita cuando la vio dijo: “Maestro vi una nubecita, pero es chiquita" Se viene la lluvia... ¿por qué dijo eso? Porque sabe que la palabra es rápida. Lo agarra Acab al rey y le dice unce tu carro que se viene la lluvia y el rey se va con los caballos detrás Elías corre, estaba mirando y de pronto corriendo, porque la palabra te mueve.

¿Faltaste un domingo? Ya estas atrasado.

Imagínate si el criado no estaba con Elías, llegaba el otro día a la montaña, Elías. Vine a ver si llueve, ¡¡ya llovió!! Yo veo lo mismo corro, las mismas personas, el mismo pantalón, pero espiritualmente nos movimos.

5. Serás como árbol plantado en las corrientes, ¿qué es el árbol? Tu árbol genealógico, las hojas, tu descendencia.

El Señor le dijo a Israel: celebrarás la fiesta de la cosecha; había 7 fiestas y una de las fiestas era la cosecha, no había fiesta para sembrar, porque no había nada para festejar, pero Dios dijo: quiero que me celebren cada cosecha. Sabes que cuando llegamos al Señor, él celebró, hizo fiesta en los cielos. Dios nos ha celebrado porque estamos acá, celebra todas las cosechas, vamos a celebrar todo.

Moisés le dijo a Faraón: dice Dios que sueltes a los esclavos porque vamos a ir al desierto a hacer dos cosas, a Adorar y dar sacrificio a Dios. El Faraón se enojó, y dijo: no los voy a dejar, solo son dos cosas, no es tan grave... pero el Faraón sabia de lo espiritual. Porque el faraón sabia que cuando adoras, te transformas en el objeto de adoración. Dice David que el que adora a un ídolo, es como él, tiene ojos y no mira tiene manos y no hace nada, tiene pies y no camina, pero el que adora a Dios camina.

El Faraón sabia que cuando adoramos se levanta la estima, nos llenamos de fuerzas del espíritu; cuando adoramos sentimos la gloria caer sobre nosotros, y cuando damos, el diablo sabe que cosechamos, y la cosecha para quién es, para bendecir nuestra casa. Adorar y dar.

Tienes que llenarte de sueños de Dios para bendecir tu casa, a todos, porque ellos pensaron en hacerte mal, pero Dios lo cambió para bien.

Para que llegues a tu destino.
Piensa en las cosas malas que han pasado tus papas, abuelos, suicidios, muertes, divorcios, enfermedades que se repiten, abusos sexuales, madres solteras, miseria; quiero que pienses si hay alguien con quien te sientes en deuda que no te permitió saldar, que te pasa la factura; quiero que piensen si le pasó algo feo grave, y te quedaste mal porque no te pasó nada... eso lo debes cortar en el nombre de Jesús.

Por: César Castets