MENSAJES DEL CIELO - VIERNES 07 DE ENERO 2011

Ángel del grupo: Preparen sus corazones, cierren sus ojos, comiencen a orar, con más amor... no los escucho.,.. oren, oren con fuerza, que el Espíritu les llegue... todavía es débil la oración. Espíritu Santo, toca a cada uno de los presentes. Padre Eterno, Tú que escuchas nuestras oraciones te entrego mi corazón, te entrego mi vida. ¡Oh Padre Santo!, perdona mis pecados, y los del mundo entero, que la paz, este con ustedes...

Todos: Y con tu Espíritu.

La Mamita (lA MADRE DE DIOS): Buenas noches grupo Si Señor, míos, queridos hijitos...

Hno. José: Bienvenida seas Madre Santísima, me postro no ante el instrumento, sino ante la voz que sale del instrumento. Bienvenida seas Madre Santísima. Gracias por estar con nosotros, dos semanas sin poder comunicarnos contigo, a través de tu grupo,...

La Mamita: Pero los he escuchado más que antes, mucho han pedido, mucho han agradecido, pero creo que han pedido más. Pero aquí estoy querido hijo, otra vez con ustedes, cubriéndolos con mi manto, manténganse en oración, quiero sentir a mis hijos inocentes, como niños,... querido hijo, háblales... escuchen con mucha atención a mi Hijo...

Jesús (Nuestro Señor): ¿Por qué sus manos están vacías? ¿Cuál es el sacrificio que hicieron ustedes por Mí? ¿Por qué están tan vacías? ¿Por qué están tan frías? Deben amar a sus hermanos... sus hermanos; porque todos son hermanos, su muerte espiritual, empieza cuando se olvidan de sus hermanos. ¿Qué sacrificio han hecho? ¿Por qué están sus manos vacías? ¿Cuántas peticiones han hecho? ¿Por cuántas personas han pedido?... y ¿qué han hecho por ellas? Una oración basta, pero ¿dónde están los frutos? He escuchado tantas promesas, me dicen: Señor ayúdame y te prometo... ¿cuántas veces? ¿Cuántas promesas se quedaron en el aire, cuántas veces se reconciliaron, cuantas veces? ¿Están reconciliados? ¿Están en paz, con ustedes?, ¿con sus hermanos?. Se que sufren, ustedes están pedidos, y se que son atacados, golpeados heridos, pero no están solos, Yo estoy con ustedes, yo estoy a su lado, y los he acompañado, siempre cuando ustedes caminan yo estoy detrás, sé que tienen miedo, sé que tienen tristeza, y sé que se sienten agobiados, pero aún en ese instante, tienen que fortalecerse con la oración. Yo estoy con ustedes, mi Madre los ha acompañado siempre y siempre está con ustedes. La casualidad no existe. Ustedes no están aquí por gusto, ustedes están aquí porque Yo los traje. Ustedes vinieron aquí porque mi manto los envolvió, los abrazó, los hizo venir. La Palabra que ustedes escuchan, que no se quede aquí, que crezca como una semilla, que esta pueda crecer y florecer a través de otras personas. La Palabra es vida, pero la Palabra bella, la luz que sale de ustedes, debe ser blanca y para que sea blanca deben estar en paz, si no están en paz, deben pedir al Espíritu Santo: ¿Cuántas oraciones dejaron de hacer, cuántas Misas dejaron de ir, por cuántos hermanos dejaron de pedir, cuantos sacrificios dejaron de hacer? Sé que están cansados, sé que los perturban una y otra vez, sé que hacen que ustedes se sientan tristes, pero Yo estoy a su lado, les he acompañado y les voy a acompañar siempre, ese es mi compromiso hasta la eternidad, siempre a su lado, y aun cuando ustedes se sienten golpeados refúgiense en MÍ, yo les doy la paz que ustedes necesitan, porque si no están en paz con ustedes, no podrán seguir adelanté, porque una persona que no tienen paz, no puede entregar paz a nadie. La Paz te dan las oraciones, las penitencias, la Comunión, la Reconciliación, las oraciones, pidan por sus hermanos mucho mas de lo que pueden pedir por ustedes mismos, ustedes son mis hermanos. Y yo hago tanto por ustedes, y los he protegido muchas veces, porque ustedes han sido pedidos, están siendo terriblemente atacados, si ustedes pudieran ver, verían una batalla sin fin, ustedes están siendo protegidos, no se olviden de pedir, mi Madre los ha acompañado tantas veces, y aun cuando llegasen el fin, ustedes no están solos, y aunque parezca todo oscuro , siempre hay una esperanza, ....pidan, quiero escuchar sus peticiones, y aquellas promesas que sé que deben de cumplir, no quiero ver sus manos vacías...

José Miguel Pajares Clausen

Grupo Católico de Oración por los Enefermos "Sí Señor"