miércoles, 2 de septiembre de 2009

HOY ME VUELVO A TI ¡OH DIOS!


Sálvame hoy, oh Dios mío, porque estoy a punto de ahogarme; me estoy hundiendo en un pantano profundo y no tengo donde apoyar los pies.
He llegado a lo más hondo del agua y me arrastra la corriente. Ya estoy ronco de tanto gritar; la garganta me duele; mis ojos están cansados de tanto esperar a mi Dios. Dios mío Tú sabes cuán necio he sido; no puedo esconderte mis pecados. Señor, Dios Todopoderoso, que no pasen vergüenza hoy por mi culpa los que confían en Ti. Señor que no se decepcionen por mi causa hoy, lo que con ansia te buscan. Por Ti he soportado ofensas; mi cara se ha cubierto de vergüenza; soy como un extraño y desconocido para mis propios hermanos.

Padre, no dejes que me hunda hoy e el lodo. Ponme a salvo de los que me odian y de las aguas profunda. No dejes que me arrastre la corriente. No dejes que el profundo remolino me trague y se cierre tras de mi. Señor, respóndeme. Tú eres bueno y todo amor. Por tu inmensa ternura fíjate en mí. No rechaces hoy a este siervo tuyo.

Respóndeme pronto que estoy en peligro. Acércate a mí y sálvame. Líbrame de mis enemigos. Tú conoces las ofensas, la vergüenza y la deshonra que he sufrido, Tú sabes quienes son mis enemigos.. Las ofensas me han roto el corazón, estoy sin ánimo y sin fuerzas. Inútilmente he buscado quien me consuele y compadezca.

Alabaré con cantos el nombre del Señor. Lo alabaré con gratitud. Al ver esto se alegrarán los afligidos y se animará el corazón de los que buscan a Dios, pues el Señor escucha a los pobres y no desprecia a los suyos que están presos. Alaben al Señor el cielo, la tierra y el mar y todos los seres que en ellos viven. Pues Dios salvará a Sión y reconstruirá las ciudades de Judo. Los hijos de sus siervos heredarán la ciudad, allí vivirán y tomarán posesión de ella; los que aman su nombre la habitarán.
Salmo 69

No hay comentarios:

Publicar un comentario