BRUJERÍA PARA TODOS LOS DE LA CASA

DOMINGO 23 DE AGOSTO 2009

Fuimos llamados a visitar, orar y a bendecir una casa en un distrito cerca de Lima.

Siete personas nos esperaban, dos de ellas ya nos habían visitado en nuestras oraciones de sanación de los viernes. Una de las personas estaba casi ciega, dos más sordas, otra problemas con el útero… todas tenían algo, hasta un niño se estaba quedando sordo… nadie se salvaba. Según ellos era por la diabetes.

Todo empezó normal con nuestras oraciones habituales, luego vino la imposición de manos y dos de nuestro grupo se empezaron a sentir mal. Seguimos con la bendición de toda la casa y las dos de nuestro grupo se sintieron peor cada vez a pesar de estar protegidas… la cosa era fuerte y ya sabíamos que les habían hecho brujería.

Para esto, sin que nadie me informara sobre la brujería, dije al terminar la reunión, que alguien había visitado a brujos o les habían leído. Luego se me acercó una de las señoras y me confesó que a ella le habían leído con hojas de coca, y que le habían dicho que la suegra les había hecho daño para que su hijo dejara esa casa.

Nos retiramos diciéndoles que vayan a Misa a confesarse y comulgar y les dejé las oraciones de la Sangre de Cristo y la de las Llagas, incluida la del Hombro derecho.

Luego me enteré por una llamada telefónica, que la menor de las hijas (14 años), apenas salimos de la casa empezó a vomitar - cuando llegamos a la casa ella estaba con fiebre -, luego de eso se empezó a sentir bien y hasta la fiebre se le fue… había salido el mal.

Más tarde recibí otra llamada que me decía que todos a los que les había puesto la mano, excepto a la hija mayor, estaban con vómitos y diarreas y que se sintieron mal. Ya el Señor estaba glorificándose y el mal saliendo de sus templos. Luego que les indiqué que rezaran en familia las oraciones que les había dejado por escrito, se empezaron a sentir bien y a todos les dio un fuerte sueño, menos al señor ciego, que se encargó de velar por el resto de la familia. No es malo los vómitos y las diarreas u orina… sabemos por experiencia (22 años) que es una forma como sale el mal del cuerpo, sobre todo si ha ingerido algo embrujado.

El día lunes 24 me enteré que todos estaban mucho mejor y que nos visitarían este viernes para reforzarles la liberación… También me enteré que no sólo a una le habían leído, sino que a otra la habían llevado a un brujo y a una vidente… el brujo cobró, la vidente, según me afirmaron… no, estos les dijeron que les habían hecho daño. Estas cosas nos las deberían decir antes de la oración para estar prevenidos, pero no, lo dicen después, pero Dios es más fuerte y nadie puede contra Él.

¡Cosa insólita pero predecible! Hoy martes 25, se apareció en casa la suegra, o sea la mamá del ciego, la que mandó hacer la brujería; ella que nuca viene a casa, llegó trayéndole frutas a su hijo, al hijo que ella misma mando embrujar para que se vaya de esa casa. Insiste en prepararle la comida y se está quedando más tiempo de lo normal en la casa. Ya le dije a la familia que no dejen que coma esa fruta y que estén muy atentos a cualquier cosa extraña que le quiera dar. Que le coloquen la Cruz de San Benito y el Escapulario de la Virgen del Carmen con su debida imposición por un sacerdote.

Cabe resaltar que los miembros del grupo (instrumentos de Dios) se sienten mal según la enfermedad o el embrujo que las personas recibieron, lo que nos da un indicativo de lo que está pasando, todas las manifestaciones son diferentes, luego, al terminar la oración vuelven inmediatamente a su estado normal. El miedo no existe en nosotros… nuestra fe en Dios es demasiada que no lo permite.

Dios y su Santísima Madre se glorificaron con sus hijos que creían en ellos, fueron a Misa, se confesaron y comulgaron… y prometieron nunca más ir a brujos, ni nada parecido que pueda ofenderlos.

José Miguel Pajares Clausen