ADULTO MAYOR

Muchas cosas que hacer y no puedes recordarlo todo.
Estas ocupado y tienes toneladas de cosas que hacer, cómo puedes recordarlo todo.

Sigue estas sugerencias:
§ Lo primero es anotar las cosas. Con la cantidad de cosas que tienes que recordar durante el día lo mejor que debes hacer es anotarlo, estará allí en tu libreta de anotaciones o al haberlo escrito puede que solo tengas que hacer memoria y estará para ti en un instante.
§ Mantén tus anotaciones juntas, cuando anotes las cosas que quieres recordar, mantén las anotaciones en un mismo lugar. De lo contrario vas a pasar mucho tiempo buscando tus notas.
§ Debes tener buena salud. Come alimentos saludables. Debe lograr obtener suficiente sueño y ejercicio. Estas cosas son todas importantes para tu memoria, permaneciendo enfocado y alerta.
§ Graba tus ideas. Algunas veces podrías querer recordar algo, pero es imposible el escribirlo, por ejemplo cuando vas manejando. Una grabadora pequeña a la mano es un dispositivo estupendo para llevar contigo y grabar tus ideas o el número de lugar de estacionamiento o un número telefónico que ves en un letrero.
§ Llama a tu contestador automático. Si estas en la oficina y quieres hacer algo cuando llegues a casa, llama a tu contestador telefónico automático y deja un mensaje. Cuando llegues a casa vas a escuchar tus mensajes y recordar lo que querías hacer exactamente.
§ Si tienes que dar un mensaje a alguien, hazlo inmediatamente que lo recibes… se te puede olvidar.
§ Mantén tu cerebro funcionando. Hazte de pequeñas obligaciones diarias. Ejemplo: Haz como yo, cómprate mascotas y aliméntalas y límpialas a la misma hora todos los días. Entra a Internet a la misma hora y lee los blog que más te interesan, envía tus comentarios. Lo importante es que tu cerebro se mantenga ocupado.
§ Haz una lista de teléfonos para que cualquiera pueda llamar en caso de emergencia y ponla en tu billetera. Si usas alguna cadena en el cuello, agrégale una plaquita con tu tipo de sangre.
§ Deja un duplicado de la llave de tu casa con alguien de confianza, por si acaso olvidas o pierdes la tuya.
§ Pídele a algún amigo que te llame por teléfono todos los días en la mañana y tú haz lo mismo con él… es una forma de enterarse si él o tú están bien.
§ Guarda en algún lugar una cantidad pequeña de dinero para que puedas tomar un taxi, comprar una pastilla, o para cualquier pequeña emergencia.
§ Por último, confía en Dios y en alguien de este mundo. Cuéntale todo lo que desees contarle y deja por escrito qué es lo que deseas que se haga para cuando el Señor te llame.

Nota: Si no eres ADULTO MAYOR y sabes de alguien que lo es, dale estás instrucciones o conviértete en el que lo llama todos los días… estarás amando a Dios y a tu prójimo como a ti mismo.

José Miguel Pajares Clausen